Cada día, al exponerte a la reflexión bíblica, Dios te recuerda sus promesas fieles y
verdaderas, las cuales necesitas creer aunque ahora te hayan rodeado una
cantidad enorme de obstáculos.
Para creer en las promesas “ilógicas” de Dios es necesario
desechar toda posibilidad lógica y dar espacio a la certeza de que nada es
imposible para él.
“Es, pues, la fe la
certeza de lo que se espera,
la convicción de lo
que no se ve”
Hebreos 11:1
¡NECESITAS UNA ALTA DOSIS DE FE!
Necesitas creerle a Dios.
A pesar de la oscuridad.
A pesar de las amenazas.
A pesar de las frustraciones.
Aférrate ahora a las palabras fieles y verdaderas de Dios aunque sus
procesos para concederte sus promesas sean incomprensibles; el hecho de que lo
sean no indica su incumplimiento... ¡Dios
no miente!
“Dios no es hombre, para que mienta, ni hijo de hombre para que se
arrepienta. Él dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?”
Números 23:19
TU SITUACION ILOGICA E IMPOSIBLE.
Precisamente ahora, estás ante una situación de la que no puedes salir
por ningún medio viable; lógicamente es imposible que salgas de ella, al
contrario, las puertas se cierran con firmeza cada día que pasa.
Sin embargo este día, precisamente ahora, Dios te confirma una promesa
que no debes considerarla como fruto del azar.
“El Eterno Dios
peleará por vosotros,
y vosotros estaréis
tranquilos”
Éxodo 14:14
Dios peleará por ti, aunque todos te hayan rodeado para acabar contigo;
cree que así es, no te angusties ni tengas miedo. Descansa en medio del caos...
ANTE TU SITUACION ILOGICA E
IMPOSIBLE.
No te desanimes ante los obstáculos grandes e inamovibles que impiden a toda costa de que lo prometido
se haga realidad tu vida.
Aprende a descansar en las promesas de Dios aunque ahora todo lo veas
oscuro, estrecho, amenazante y frustrante; él hará por ti, lo que no puedes
hacer ahora.
No trates de adelantarte con métodos desesperados, solamente da un paso
de fe a la vez. Dios ya fijó tiempos y circunstancias para llevar a feliz
término lo prometido.
No te dejes llevar por el pánico aunque todo a tu alrededor se remueva
de su lugar y se hunda por completo.
No te enfoques en los acontecimientos, por muy descontrolados que
parezcan; pon tu mirada en el Dios de los cielos.
Persevera con insistencia en la oración y en la reflexión de la Palabra
de Dios para que tu fe, fortaleza, esperanza y gozo no declinen a pesar de las
circunstancias.
Sigue cumpliendo con fidelidad la tarea específica encomendada por
Dios.
¡Recuerda!
¡No lo olvides!
“Estad quietos, y
conoced que yo soy Dios”
Salmo 46:10
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José Alfredo Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje
de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la
tierra!
“Porque así nos ha mandado el Señor,
diciendo: Te he puesto para luz de todas las gentes, a fin de que seas para
salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.
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