Nuestro objetivo como
cristianos en el mundo es hacer que la Palabra de Dios CREZCA y se DIFUNDA. Todas nuestras acciones deben ir dirigidas hacia ese fin,
independientemente a la actividad laboral que desarrollemos. Necesitamos
testificar sobre el impacto profundo que produce el resultado de su estudio y reflexión;
efecto que se evidencia en la convicción sobrenatural de su veracidad. No en vano el salmo 119 dice: “La exposición de
tus palabras alumbra, hace entender a los simples” Salmo 119:130.
Necesitamos testificar de la experiencia personal que hemos obtenido con
el estudio y la reflexión de la Palabra de Dios; así como también dar fe de su
veracidad absoluta, en la que no hay engaño ni margen de error. Necesitamos transmitir la enseñanza recibida,
para que por medio de ella, muchas vidas sean transformadas por el poder
sobrenatural del Espíritu Santo.
Estamos viviendo en un entorno de corazones duros y mentes necias, quienes
a pesar de escuchar y ver muchas evidencias dadas por Dios, aún se mantienen en
esa doble actitud; de ahí que es importante que no nos quedemos en ese estado
de indiferencia. Como cristianos no debemos quedarnos de “brazos cruzados”. Necesitamos urgentemente ponernos bajo las órdenes
incondicionales de Dios para testificar del impacto que produce su Palabra y
para dar fe de su veracidad absoluta; obviamente que la capacidad no vendrá
de nosotros mismos, sino de la acción sobrenatural del Espíritu Santo obrando a
través nuestro, pero también es importante que perseveremos e incrementemos
nuestro tiempo en el estudio y la reflexión bíblica para que su acción ilumine
nuestro entendimiento, sensibilice nuestros corazones, impulse nuestros deseos
para testificar, nos mantenga despiertos sin perder la noción de sus verdades
absolutas y mantengamos la paz en medio de las tormentas que nos azoten.
Cuando tu objetivo fundamental sea el de buscar por todos los medios el crecimiento y
la difusión de la Palabra de Dios, entonces estarás viviendo para lo que
naciste; todo cuanto hagas tendrá sentido. Verás como Dios te abrirá caminos
donde no los hay, tendrás siempre su provisión oportuna aun hasta en el más
árido de todos los desiertos y tendrás su protección poderosa en medio de todos
los peligros por los que tengas que atravesar. Todo se inclinará a tu favor...
“Así que,
hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor
siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”
1 Corintios 15:58.
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@JAlfredoLievano
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