La acción eficaz
de la Palabra de Dios tiene poder para hacerte ver la vida desde la perspectiva
correcta. Derriba los espejismos y voces que el mundo ha levantado como
verdaderos.
Al reflexionar
en su contenido, la Palabra de Dios alumbra tu mente haciéndote entender con
claridad sus verdades eternas. El salmo 119 dice: “La exposición de tus Palabras ALUMBRA; hace
entender a los simples” (Salmo 119:130).
Es entonces cuando comienzas a “leer más allá de letra”, a ver “más allá de los
espejismos”, cuando entiendes que la única razón para vivir está EN Dios,
cuando reconoces tu total y continua dependencia de él, cuando entiendes que no
es por méritos y capacidades personales que te salva sino por la obra que hizo
por medio de Cristo en la cruz. Es entonces cuando te encuentras con la verdad
que libera. “Y conoceréis
la verdad; y la verdad os hará libres” (Juan
8:32). Libres de la ceguera, libres de la incredulidad, libres
de la ignorancia, libres del egoísmo, libres del temor, libres de la cobardía.
Cuando lees “más
allá de la letra” y ves “más allá de los espejismos”, es cuando tus prioridades
cambian espontáneamente para enfocarte en las cosas del cielo, y no en las de
la tierra así como lo escribe el apóstol Pablo: “Si, pues, habéis resucitado con Cristo,
buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned
la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra” (Colosenses 3:1-2)
Dedica tiempo para exponerte al contenido de la
Palabra de Dios, pídele que su acción VIVA y EFICAZ transforme radicalmente tu
interior.
“Porque la
palabra de Dios es viva y eficaz, y más cortante que toda espada de dos filos;
y penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y
discierne los pensamientos y las intenciones del corazón” (Hebreos 4:12)
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@JAlfredoLievano
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