El mismo Dios que obró a favor de su pueblo a lo largo de toda su historia, es el mismo que con su poder obrará a tu favor.
Ten la seguridad que él ha escuchado ese clamor que ha brotado desde lo más profundo de interior.
Ha escuchado tu oración...
Ha percibido tu dolor... Tu angustia... Tus interrogantes... todo lo que ahora no te deja dormir con tranquilidad ni desenvolverte cómo quisieras.
Ten la plena seguridad que la ayuda oportuna de Dios llegará aunque para ti sea muy tarde. Pondrá todos los medios a tu disposición para asistirte en lo que necesites. Les dará la orden para que lo hagan.
Que la situación que te apremia en estos momentos, no se constituya en una barrera para cumplir con la misión que Dios te ha encomendado, aunque ahora no dispongas de los recursos y capacidades.
No es en vano que estés pasando por las circunstancias presentes, pues son como la “escuela” en la que tu fe y paciencia se consolidarán. Los tiempos que se avecinan son muy difíciles y por lo tanto necesitarás enfrentarlos con la madurez que estos requieren.
Así que no te preocupes...
¡Dios sabe COMO CONDUCE tu vida!
Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; Junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, No temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; Tu vara y tu cayado me infundirán aliento.
Salmo 23:1-4
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