"BASTA YA DE TODAS VUESTRAS ABOMINACIONES" (Ez 44,6)

Toda acción trae consecuencias. En su momento, Dios cortará de la faz de la tierra todo aquello que se edificó sobre las bases de la maldad. Nadie podrá escaparse por muchas estrategias que invente, ni podrá continuar con sus proyectos malignos. Dios derramará su justicia sobre el mundo entero... "Convertiré la tierra en desierto, y cesará la soberbia de su poderío... hasta que no haya quien pase" (Ez 33,28)

"BASTA YA DE TODAS VUESTRAS ABOMINACIONES" (Ez 44,6)

Dios no cesa de recordar y de advertirle a la humanidad que toda maldad trae consecuencias, y por eso le invita a cambiar de rumbo antes de que sea demasiado tarde... "No quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino y viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos" (Ez 33,11)

Es tiempo que la humanidad entera ponga atención a la palabra de Dios... "Venid ahora, y oíd que palabra viene del Eterno Dios" (Ez 33,30). Es tiempo de cambios radicales... "Ahora dice el Eterno Dios, convertíos a mí con todo vuestro corazón" (Jl 2,12)

En medio de todo este contexto de maldad progresiva, es necesario que los hijos de Dios no olvidemos nuestra tarea fundamental de iluminar con la LUZ de Cristo hasta donde sea posible, empleando todos los recursos a nuestro alcance, pero sobre todo con nuestro testimonio de vida. "Alumbre vuestra LUZ delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos" (Mt 5, 16)