VIDA PLENA EN EL ESPÍRITU

Es prioritario que nos despojemos de todo estorbo interno que nos impida disfrutar y reflejar una vida plena en el Espíritu.

“En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad.” 

Ef. 4, 22-24

Seamos conscientes que en nuestras fuerzas somos incapaces de hacerlo, necesitamos que el Poder transformador de Dios opere en nosotros el deseo espontáneo de  vivir en santidad.

"Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad"

Fil. 2,13

Es importante que NO dejemos de lado la vida de oración; necesitamos orar sin cesar para fortalecernos. Así lo enseña nuestro Señor Jesucristo...

"Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil"

Mt. 26,41

Oremos para que el Espíritu Santo gobierne nuestros deseos, pensamientos y actitudes; es la única manera como venceremos nuestros impulsos pecaminosos que constantemente nos asedian y dominan.

"Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne; pero los que son del Espíritu, en las cosas del Espíritu. Porque el ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del Espíritu es vida y paz"

Rm 8,5-6

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Dice el Señor:

"Buscadme y viviréis"

Am 5,4

Solo Dios tiene el poder para fortalecernos y mantenernos firmes; reconozcamos ante él nuestra constante necesidad y busquémosle siempre.

"Y a aquel que es poderoso para guardaros sin caída, y presentaros sin mancha delante de su gloria con gran alegría, al único y sabio Dios, nuestro Salvador, sea gloria y majestad, imperio y potencia, ahora y por todos los siglos. Amén"

Jd. 1,24-25

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