Existen muchas razones por las que se pueden atravesar momentos de
angustia en la vida, pero en esta ocasión nos enfocaremos en aquellos momentos
relacionados con las consecuencias de la rebeldía deliberada en contra del consejo
de Dios.
Nada resulta bien cuando se pasan por alto los lineamientos
establecidos por Dios; en un principio da la impresión que todo “marcha
sobre ruedas”, pero con el paso del tiempo los resultados catastróficos se
hacen evidentes e insoportables.
Esta reflexión va
dirigida hacia aquellas personas que precisamente ahora enfrentan momentos de
angustia por haber desobedecido abiertamente todos los consejos oportunos e insistentes
que Dios les hizo llegar de diversas maneras.
Era de esperarse que ese momento llegara; has comprobado que todo lo
que se hace de acuerdo con tus necios caprichos, tarde o temprano termina mal;
ahora estás en el fondo de la fosa que tú cavaste, y como habrás comprobado,
nadie puede sacarte de ahí.
Definitivamente que tu caso es insoportable en gran manera, al grado
tal de afectar tu salud emocional y física; no sabes hasta dónde vas a llegar
con esta situación tan angustiante. Era de esperarse que todas estas cosas te
alcanzaran irremediablemente; pero Dios, en su infinita misericordia te envía ahora
la Palabra oportuna para este momento...
“Cuando estuvieres en angustia, y te alcanzaren todas estas cosas, si en
los postreros días te volvieres al Eterno Dios, tu Dios, y oyeres su voz; porque
Dios misericordioso es el Eterno Dios, tu Dios; no te dejará, ni te destruirá...”
Deuteronomio 4:30-31
Pídele perdón a Dios por haberle desobedecido deliberadamente, por
haberle desafiado con tu conducta réproba, por haber procedido con conocimiento
de causa, por haber desechado sus palabras.
¡Dile a Dios!
“Crea en mí, oh Dios,
un corazón limpio;
y renueva un
espíritu recto dentro de mi”
Salmo 51:10
Toma la determinación de dar un giro radical de vida y apartarte de
todo aquello te haga desobedecer a Dios; hazlo aunque te duela y te cueste.
ESTAS A PUNTO DE ENFRENTAR ALGO PEOR
¡Tú lo sabes!
Por eso es necesario que te vuelvas a Dios implorando su misericordia,
pero a la vez tomando la determinación de proceder de acuerdo a sus
lineamientos, antes de que las consecuencias que generaste en el pasado te
destruyan. Toma en cuenta el siguiente consejo bíblico...
“Acerquémonos pues
confiadamente al trono de la Gracia para alcanzar misericordia y hallar gracia
para el oportuno socorro”
Hebreos 4:16
Dios te está dando otra oportunidad; él es capaz de revertir esas
consecuencias irremediables que provocaste en el pasado para encausarlas en sus
propósitos, aunque para ello tenga que permitir procedimientos inaceptables e
incomprensibles.
Aunque estés en el corazón de la tempestad que ocasionaste, ten la
certeza de que Dios te guarda en medio de ella y que dará la orden a tu favor
aunque todos se opongan por unanimidad.
“Aprende hoy y
reflexiona en tu corazón que el Eterno Dios es Dios arriba en el cielo y abajo
en la tierra, y no hay otro”
Deuteronomio 4:39
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José Alfredo Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje
de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la
tierra!
“Porque así nos ha mandado el Señor,
diciendo: Te he puesto para luz de todas las gentes, a fin de que seas para
salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.
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