¡De un extremo a otro!
De la incredulidad a la fe...
De la angustia a la paz...
Del egoísmo al amor...
De la inseguridad a la
seguridad...
De la cobardía al valor...
Únicamente el
poder sobrenatural de Dios, operado por
el Espíritu Santo puede transformarnos radicalmente... Es imposible que por nosotros mismos alcancemos
tan anhelado cambio en las diversas áreas de nuestra vida.
Necesitamos cambios profundos y radicales...
¡Necesitamos ir al otro extremo!
Es importante
por lo tanto incrementar e intensificar nuestro tiempo a solas con Dios en oración
y reflexión de su Palabra, para que al ser revitalizados por su acción,
reflejemos una vida coherente a las enseñanzas de Cristo.
“De modo que si
alguno está en Cristo, nueva criatura es;
las cosas viejas pasaron; he aquí todas son
hechas nuevas”
2 corintios 5:17.
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José Alfredo Liévano.
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EN DIOS
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