La única
razón por la que estás en la tierra es para ser un medio de difusión de la
Palabra de Dios. Estés donde estés, hagas lo que hagas, tienes la
responsabilidad de proyectarla con tus hechos y palabras. Esta es la misión fundamental de todo cristiano. “No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os
elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis frutos, y vuestro
fruto permanezca...” Juan 15:16. Dios
te ha puesto para ser luz en el lugar donde estés o vayas, independientemente a
tu actividad laboral. “Así alumbre
vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y
glorifiquen a vuestro Padre que está en el cielo.” Mateo 5:16.
Ponte bajo
las órdenes incondicionales de Dios para ser un rayo de luz que se difunda en
medio de las tinieblas de la tierra. Él pondrá en tus manos todos los
recursos que necesites y moverá tus circunstancias; a la vez su Espíritu producirá
convicciones firmes en su Palabra, sensibilizará
tu corazón, te dará perseverancia en
medio de toda oposición y tendrás la fuerza para vencer toda tentación. Necesitas
vivir para lo que naciste, vivir para lo que Dios te eligió desde antes que te formara
en el vientre de tu madre. Creo por ejemplo, que la tecnología es un
excelente y apropiado recurso para difundir sin límites la Palabra de Dios
hacia todas las naciones de la tierra, es por eso que puedes aplicar el siguiente
versículo para tu vida: “Antes que te
formase en el vientre te escogí y antes que naciese te santifiqué, te di por
profeta a las naciones.” Jeremías 1:5. Dios te trajo a esta época avanzada para que
lo hagas. Si Dios te ha proporcionado estos recursos y cuentas con acceso a las
redes sociales es para ese propósito, no para que sean desperdiciadas en vanidades
que en nada edifican el espíritu.
Vive para lo
que naciste, siembra la Palabra de Dios en donde sea posible; Él te
preservará sobre la tierra. Tendrás su asistencia continua en medio del
ambiente peligroso que te rodea. Vayas donde vayas su presencia activa estará
siempre contigo. Te enviará sus ángeles para asistirte en el camino. “El te librará del lazo del cazador, de la peste
destructora, con sus plumas te cubrirá, y debajo de sus alas estarás seguro... No temerás al terror nocturno, ni saeta que
vuele de día, ni pestilencia que ande en oscuridad, ni mortandad que en medio
del día destruya. Caerán a tu lado mil, y diez mil a tu diestra; más a ti no llegará... pues a sus ángeles mandará acerca de ti para
que te guarden en todos tus caminos.” Salmo
91: 3-6,11. Ninguna autoridad
terrenal logrará frustrar lo que Dios decidió para ti. Aunque todos estén en tu
contra, no te dejes intimidar, pues Dios estará de tu parte, él se hará cargo
de ellos.
Vive para lo
que naciste, y no conocerás la frustración. Podrás asegurar con convicción como lo hizo el
apóstol Pablo: “En nada seré
avergonzado.” Filipenses 1:20. Haz lo que te corresponde y espera siempre
en la acción poderosa, soberana y fiel de Dios a tu favor, pues se lo ha
prometido a todos aquellos que se comprometen con su causa. “Y aquí yo estoy con vosotros todos los días hasta
el fin del mundo.” Mateo 28:20. Gozarás siempre de su capacitación, protección
y provisión para que lleves a feliz término y con éxito la misión encomendada.
¿Has
entendido ahora por qué estás aquí?...
¿Has
entendido ahora por qué es necesario vivir para lo que naciste?...
¿Has
entendido ahora que necesitas ponerte bajo las órdenes incondicionales de Dios?...
¿Has entendido
ahora lo que significa ser un cristiano comprometido con Dios?...
¿Lo has
entendido todo?...
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