Tienes motivo
para hacer notorias las obras de Dios; esas obras que SIN MERECERLAS ha hecho y
continuará haciendo en ti.
Dios desde
siempre ha gobernado con sabiduría y poder todos tus acontecimientos, aun
aquellos que aparentemente se salieron totalmente de control, aquellos que nunca
entendiste y sigues sin entender.
Has comprendido
que la actividad de Dios sobre ti es una realidad innegable que te envuelve
constantemente.
Acuérdate de cada
hecho maravilloso en el que Dios intervino a tu favor aunque no existieran razones
para que los merecieras. Hechos saturados de su GRACIA y MISERICORDIA, y dignos
de ser testificados...
Acuérdate de aquellas
ocasiones en las que ya no podías levantarte, y la mano misericordiosa de Dios
intervino oportunamente. ¿Acaso lo merecías?
Acuérdate
cuando tus esperanzas estaban totalmente perdidas, y en el momento menos
pensado todo cambió repentinamente a tu favor. ¿Acaso lo merecías?
Acuérdate
cuando en aquella desesperación saturada de angustia clamaste a Dios y su
respuesta no se hizo esperar. ¿Acaso lo merecías?
Dios ha sido JUSTO
y MISERICORDIOSO contigo; no porque lo hayas merecido, sino por haber creído en
la obra que Jesucristo hizo a tu favor al morir por ti en la cruz. “Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no
de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe” (Efesios 2:8-9). Es por GRACIA de Dios que has alcanzado
JUSTICIA y MISERICORDIA por medio de Jesucristo, NO por tus méritos y
capacidades.
Es por la
JUSTICIA y la MISERICORDIA de Dios que no solo tienes derecho a las bendiciones
presentes, sino aquellas eternas que traspasan las fronteras del universo.
“Siendo justificados gratuitamente por
su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús”
Romanos 3:24
“Justificados, pues, por la fe, tenemos
paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo; por quien también tenemos entrada por la fe a
esta gracia en la cual estamos firmes, y nos gloriamos en la esperanza de la
gloria de Dios”
Romanos 5:1-2
“Pero cuando se manifestó la bondad de
Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, nos salvó, no por obras
de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia, por el
lavamiento de la regeneración y por la renovación en el Espíritu Santo, el cual derramó en nosotros abundantemente por
Jesucristo nuestro Salvador, para que justificados por su gracia, viniésemos a
ser herederos conforme a la esperanza de la vida eterna”
Tito 3:4-7
DIOS HA SIDO JUSTO CONTIGO
TWITTER.
@JAlfredoLievano
9 comentarios:
Gracias por el mensaje y muy cierto. Me gustaria colocaras un boton para compartir en Facebook, saludes y bendiciones.
Es un lindo pensamientos, como algunas otras reflexiones que publican y que siempre son muy atinadas para enfrentar algunas situaciones de la vida.
porque ya no hay mas reflexiones?
No hay mas reflecciones??
Q pasa con la eflexiones?
Extrano mucho las reflecciones eran de mucha bendicion para mi vida.
Alguien Sabe porque ya no publican mas ?
Hola alfredo como sta. Le sucedio algo. Espero este bien y recuerde q todo siempre lo q nos pasatiene un proposito de Dios y el desierto solo es temporal bendiciones
Extraňo las reflexiones, espero que se encuentre bien bendiciones...
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