En
tu peregrinar cristiano es necesario que constantemente atravieses todo tipo de
feroces tormentas y áridos desiertos.
No eres inmune ante tales circunstancias como lo puedes corroborar ante la enorme
crisis que ahora enfrentas. Nuestro
Señor Jesucristo te lo recuerda en su Palabra: “Estas cosas os he hablado para que EN MÍ
tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción, pero confiad, yo he vencido al
mundo”. (Juan 16:33). Confía
en Dios. Debes de entender y no dudar ni
un solo instante que estas amenazas aflictivas que ahora te envuelven no te
derribarán, pero SÍ fortalecerán tu fe y paciencia. Es ahora cuando debes
echar mano a las promesas de Dios reveladas en su Palabra y descansar en ellas
aunque el panorama sea totalmente contrario. No te desanimes por lo que ahora
te sucede, pues así como en ocasiones pasadas viste la intervención directa de
Dios, de la misma manera él hará que puedas atravesar la furiosa tormenta por
la que ahora navegas o los áridos desiertos que te cansan y debilitan.
PASE
LO QUE PASE, TENDRÁS PAZ.
Agregado a tu crisis personal,
debes tener presente que la situación a nivel mundial está empeorando debido al
incremento de la maldad; de hecho, nuestro Señor Jesucristo lo anunció con
anticipación. “Y
por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará” (Mateo 24:12); y como bien
lo sabes y comprobado la maldad multiplicada afecta negativamente todos los rincones
del mundo. Sin embargo en este contexto fuerte de maldad que respiras ahora,
Dios te respaldará en la labor que te ha encomendado, te protegerá de todo peligro y proveerá todas tus
necesidades así como siempre lo ha hecho. Todo
cuanto necesites vendrá directamente de él. (Esto es algo que debes tener muy en cuenta) Las puertas selladas te serán abiertas de par
en par en medio de grandes e inusuales
portentos para que así continúes tu marcha. “Cuando pases por las aguas, yo estaré contigo; y si por los
ríos, no te anegarán. Cuando pases por el fuego, no te quemarás, ni la llama
arderá en ti”. (Isaías 43:2)
Gózate en Dios, pues ante los
eventos peligrosos y difíciles que vienen, él se encargará de lo tuyo y de tu
familia. “... tu pleito yo lo defenderé, y yo salvaré a
tus hijos”. (Isaías 49:25). Dios hará lo que definitivamente no puedes
hacer, te dará lo que no puedes adquirir y lo más grande es que cumplirá su
propósito en ti. “Por
cuanto has guardado la Palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la
hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que
moran sobre la tierra” (Apocalipsis 3:10)
PASE
LO QUE PASE, TENDRÁS PAZ.
-------------------------.
Twitter:
----------------------------
1 comentario:
Hermosa palabra habló directamente a mi corazón: gracias el Señor siga usando su vida como herramienta para bendecir a multitudes!!!!! Dios le bendiga.
Publicar un comentario