jueves, 22 de marzo de 2012

SI ENCONTRASTE EL CAMINO, MUESTRALO.

Vivimos en medio de un mundo lleno de espejismos que nos brinda soluciones momentáneas y falsas; por eso, tu misión específica sobre la tierra, es mostrar el único camino verdadero que lleva a la vida plena y definitiva.
Este camino es Jesucristo. El dijo:

Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre si no es por mí.
Juan 14:6.


Dios no quiere que promuevas una religión, sino una relación personal con él por medio de Jesucristo. La oportunidad de hacerlo, la tienes todos los días a toda hora, no en vano tienes a tu disposición todos esos recursos que has recibido; por eso se dice que tu labor es a “tiempo completo”. Allí precisamente donde estás has de cumplirla fielmente. Precisamente por eso, Dios te ha concedido el privilegio de estar en ese lugar al que jamás pensaste llegar. No te desenfoques de tu labor. Es necesario que alumbres con tus palabras y con tu testimonio de vida, además de ser diligente en tus responsabilidades seculares.
Recuerda lo que nuestro Señor Jesucristo dijo:


Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.
Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.

Mateo 5:13-16.


El mundo va por caminos de muerte por haber desechado la insistente voz de Dios que llama a una conversión genuina; y está en tus manos encauzar en el rumbo correcto a las personas que conoces. Es tu responsabilidad primaria. No lo hagas por obligación, hazlo por compasión.

Pídele al Señor que sensibilice tu corazón ante las necesidades espirituales de las personas que te rodean, para que dicha sensibilidad te impulse a hacer algo específico por ellas; además ora por sabiduría para que sepas como llevar a cabo tu labor.

Ten por seguro que si esa es tu meta diaria, tendrás siempre el respaldo de Dios en todo lo que hagas, pues estará contigo siempre para proveerte, defenderte y capacitarte. El ya te lo prometió.

Y he aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén.

Mateo 28:19-20

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No lo olvides...
Si encontraste el camino, muéstralo.
Conduce a los demás a través de él.
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1 comentario:

Noemi dijo...

Muchisimas bendiciones hermano Alfredo, saludandole de acá nuestro bello país El Salvador, San Salvador, visitandole nuevamente en su blog que es una bendición, desde mi blog
www.creeenjesusyserassalvo.blogspot.com