¿Qué dice Dios ante lo que vas a hacer?
El hecho que “todo el mundo lo haga”, no justifica ni aprueba dicho procedimiento delante de él.
Allí donde estás es necesario que marques la diferencia y seas influencia positiva para quienes te rodean.
Nuestro Señor Jesucristo dice lo siguiente:
Vosotros sois la sal de la tierra; pero si la sal se desvaneciere, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres.
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.
Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Mateo 5:13-16
Vosotros sois la sal.
Una de las propiedades de la sal, es la de evitar la corrupción.
La sal detiene todo proceso de pudrición.
Así también nosotros los cristianos hemos de frenar todo proceso de pudrición, comenzando en nuestro hogar.
¿Qué actitudes estamos tolerando dentro de nuestro matrimonio, con nuestros hijos o nuestra familia en general?
Además, hemos de frenar todo proceso de pudrición dentro de nuestro entorno laboral.
¿Estamos aprobando o cometiendo acciones deshonestas dentro de nuestros trabajos?
¿Cómo está nuestra ética profesional?
También hemos de frenar todo proceso de pudrición dentro del ámbito social en el que vivimos.
¿Seguimos la corriente con pautas de comportamiento que se apartan totalmente de lo establecido por Dios?
¿Las hemos llegado a considerar tan “normales” que ya no nos afecta nada?
Algo más, hemos de frenar todo proceso de pudrición, dentro del ámbito religioso.
¿Estamos tolerando doctrinas que van en contra de lo que nuestro Señor Jesucristo enseñó?
Las preguntas anteriores no son para responderse de forma inmediata, sino para que revisemos a la luz de la Palabra de Dios si estamos procediendo conforme a sus principios.
El apóstol Pablo escribe al respecto:
No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Romanos 12:2
En otras palabras, se nos está diciendo que no sigamos la corriente de lo que hacen los demás.
Eso no vale...
Mucho cuidado con las influencias negativas que recibas y desde luego, mucho cuidado con influir para mal sobre otros...
También dice el apóstol Pablo:
Para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo; asidos de la palabra de vida...
Filipenses 2:15-16
Es un hecho que vivimos en medio de una generación maligna y perversa, en la cual, la mayoría es la que manda.
Hemos de ser valientes en hacer las cosas como Jesús las haría...
Vosotros sois la luz.
Uno de los símbolos de la luz, es el conocimiento.
Nuestra misión como cristianos en el mundo es la de transmitir el verdadero conocimiento que está revelado en la Sagrada Escritura.
El verdadero conocimiento es la doctrina que Jesús nos enseñó.
El verdadero conocimiento es JESUS...
El es la luz verdadera que alumbra a todo hombre, pero que lamentablemente fue rechazada por la mayoría.
Veamos lo que dice el apóstol Juan:
Aquella luz verdadera, que alumbra a todo hombre, venía a este mundo.
En el mundo estaba, y el mundo por él fue hecho; pero el mundo no le conoció.
Juan 1:9-10
Veamos que más sigue escribiendo el apóstol Juan al respecto:
El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios.
Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.
Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas.
Juan 3:18-20
El mundo ha rechazado a Cristo...
Ha preferido vivir bajo sus propios conceptos y estilo de vida...
La única forma para no andar en tinieblas es seguir incondicionalmente a Cristo.
No existe otra alternativa:
Yo soy la luz del mundo; el que me sigue, no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida.
Juan 8:12
Y el que me ve, ve al que me envió.
Yo, la luz, he venido al mundo, para que todo aquel que cree en mí no permanezca en tinieblas.
Juan 12:45-46
Cuán importante es nutrirnos de Cristo para que brillemos con su luz en medio del mundo entenebrecido en el cual vivimos...
Hemos de ser antorchas encendidas...
Hemos de ser portadores del verdadero conocimiento, no solamente con nuestras palabras, sino con nuestras acciones...
Para eso te ha puesto Dios en el mundo, para que le des a conocer...
Para que disipes las tinieblas que hay a tu alrededor, y no que contribuyas a propagarlas.
Cuando el apóstol Pablo le escribe a los efesios les dice que no sean participes con los hijos de desobediencia:
Nadie os engañe con palabras vanas, porque por estas cosas viene la ira de Dios sobre los hijos de desobediencia.
No seáis, pues, partícipes con ellos.
Porque en otro tiempo erais tinieblas, mas ahora sois luz en el Señor; andad como hijos de luz.
Efesios 5:6-8
Continúa diciendo:
Y no participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas; porque vergonzoso es aun hablar de lo que ellos hacen en secreto.
Mas todas las cosas, cuando son puestas en evidencia por la luz, son hechas manifiestas; porque la luz es lo que manifiesta todo.
Por lo cual dice:
Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo.
Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos.
Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.
No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu, hablando entre vosotros con salmos, con himnos y cánticos espirituales, cantando y alabando al Señor en vuestros corazones; dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo.
Efesios 5:11-20
Agrega también en la carta a los tesalonicenses:
Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas, para que aquel día os sorprenda como ladrón.
Porque todos vosotros sois hijos de luz e hijos del día; no somos de la noche ni de las tinieblas.
Por tanto, no durmamos como los demás, sino velemos y seamos sobrios.
1 Tesalonicenses 5:4-6
Dios quiere que seamos diferentes en nuestras palabras y conducta...
Dios quiere que le reflejemos...
Si estamos aquí en la tierra es para que seamos motivo de salvación para los demás...
Quiere que nuestra vida sea motivo para que otros sientan la necesidad de buscarle y conocerle...
Para eso estamos aquí:
Porque así nos ha mandado el Señor, diciendo:
Te he puesto para luz de los gentiles, a fin de que seas para salvación hasta lo último de la tierra.
Hechos 13:47
Si Dios nos ha mostrado su luz en la faz de Jesucristo, si hemos conocido la verdad, hemos de propagarla con nuestras palabras y estilo de vida...
Estamos en la tierra para mostrar la luz a los ciegos espirituales:
Para que abras sus ojos, para que se conviertan de las tinieblas a la luz, y de la potestad de Satanás a Dios; para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados y herencia entre los santificados.
Hechos 26:18.
Si Dios ha resplandecido en tu corazón, es necesario que espontáneamente proyectes su luz en el entorno que estás.
Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús.
Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.
2 Corintios 4:5-6
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