Has comprobado por medio de circunstancias diversas que las seguridades terrenales son inestables, que de un día para otro pueden faltar; por lo tanto, no te aferres a ellas, aférrate a Dios, creyendo que no te abandonará.
"Sean sus costumbres sin avaricia, contentos con lo que tienen ahora; porque Dios dijo: No te dejaré ni te abandonaré"
Hb 13,5
Ha llegado el momento en el que debes depositar tu total confianza en la provisión de Dios; será él quien propiciará los acontecimientos para que no te falte lo necesario.
"No se afanen diciendo: ¿qué comeremos o qué beberemos, o qué vestiremos? porque todos los demás buscan todas estas cosas, pero el Padre Celestial sabe que tienen necesidad de todas estas cosas; por eso, busquen primero el reino de Dios y su justicia, y todo lo que les hace falta les será añadido"
Mateo 6, 31-33
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