CUANDO ESTÉS EN EL DESIERTO DE LA PRUEBA

Cuando estés en el "desierto" de la prueba, no te desesperes, ni pierdas tu fe ni tu paciencia al no ver ninguna solución inmediata.

"Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas, sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia. Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin que os falte cosa alguna"

St 1, 2-4

Cuando estés en el "desierto" de la prueba, ten la certeza que Dios escucha el clamor desgarrador que brota desde lo más profundo de tu ser; la certeza que hasta el más insignificante gemido de dolor ha llegado ante su presencia.

"Tarde, mañana y mediodía

 me lamentaré y gemiré,

y Él oirá mi voz"

Salmo 55,17

Cuando estés en el "desierto" de la prueba, ten la certeza que en medio de  todas "esas situaciones" dolorosas e inciertas, la presencia soberana de Dios se mantiene obrando a tu favor; aprende a "verle" con los ojos de la fe, aprende a "verle" más allá de las circunstancias.

"Por fe andamos,

No por vista"

2 Cor 5,7

Cuando estés en el "desierto" de la prueba, ten la certeza que Dios no te suelta; que aunque te sientas totalmente a la deriva, su mano te conduce, así como un padre conduce a su hijo.

"Y en el desierto has visto que el Dios Eterno, tu Dios te ha traído, como trae el hombre a su hijo, por todo el camino que habéis andado, hasta llegar a este lugar"

Dt 1,31

CUANDO ESTÉS EN EL DESIERTO
DE LA PRUEBA 

Sigue avanzando por el camino que Dios te ha mostrado aunque no veas nada en el horizonte y para ti sea demasiado tarde; ten la firme certeza que siempre tendrás en su momento todo cuanto necesites para que tu marcha no se detenga. Al final llegarás a la meta...

"He aquí yo envío mi Ángel delante de tu para que te guarde en el camino, y te introduzca en el lugar que yo he preparado"

Ex 23,20