Dale gracias a Dios por tu existencia, a pesar de la oscura incertidumbre que te envuelve. Si hasta esta fecha te ha preservado, es porque llevará a feliz término su propósito en ti.
No reniegues ante las circunstancias que ahora te afectan, son parte del proceso que Dios está empleando para formarte y restaurarte; sus planes superan a los tuyos, todos van encaminados para tu bien, y sabe porque los ejecuta.
Avanza, confía y descansa en Dios, aunque por ahora no aceptes ni comprendas el motivo de tus circunstancias adversas; él sabe como y porqué permite tus acontecimientos.
Avanza, confía y descansa en Dios; él hará que ese proyecto que aun no se ha consolidado, sea una evidencia contundente de su poder victorioso y transformador.
Avanza, confía y descansa en Dios. No te cuestiones como llevará a cabo lo que determinó hacer contigo; no te corresponde saberlo, sino creerlo. Los milagros no se cuestionan, se creen.
TU VIDA TIENE PROPÓSITO
No quedará a la deriva.
No se echará a perder.
No se desperdiciará.
Avanza...
Confía...
Descansa...
El que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo
Filipenses 1,6
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