Al hacer un recorrido extenso a lo
largo de la Biblia, aparecen muchos textos cuyo contenido “no son bien
recibidos por la lógica” al no encajar dentro de sus limitados patrones de
razonamiento.
“Porque la palabra de la cruz es
locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es
poder de Dios, Pues está escrito: Destruiré la sabiduría de los sabios, y desecharé
el entendimiento de los entendidos”
1
Corintios 1:18-19
“Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de
Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de
discernir espiritualmente”
1
Corintios 2:14
“¡Oh profundidad de las riquezas de la
sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e
inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién
fue su consejero?”
Romanos 11:33-34
LA
IMPORTANCIA DEL DISCERNIMIENTO ESPIRITUAL.
Dios revela su enseñanza para
todo aquel que se sumerge en el estudio reflexivo de su contenido; sin embargo,
resulta imposible asimilarlo por medio de patrones mentales sino a través de la
iluminación del Espíritu Santo.
Por ejemplo:
¿Cómo asimilar la Eternidad de Dios?
¿Cómo asimilar el Poder ilimitado de
Dios?
¿Cómo asimilar las acciones soberanas
de Dios?
¿Cómo asimilar la Encarnación de
Jesucristo?
¿Cómo asimilar el mensaje del
evangelio?
¿Cómo asimilar la resurrección de los
muertos?
¿Cómo asimilar la Vida Eterna?
Estas y muchas preguntas surgen desde
el corazón sediento de la sabiduría divina; es por ello, que antes de exponerse
al estudio reflexivo de la Palabra de Dios sea necesario orar por
discernimiento espiritual; es necesario que la acción iluminadora del Espíritu Santo inunde los rincones más
profundos de los patrones mentales.
ES
NECESARIO “OIR” COMO LOS SABIOS.
“El Eterno Dios despertará mi oído
para que oiga como los sabios”
Isaías
50:4
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José Alfredo Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra!
“Porque
así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te he puesto para luz de todas las
gentes, a fin de que seas para salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.
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