viernes, 29 de diciembre de 2017

EL ENGAÑO... ¡ARMA MORTAL DE SATANÁS!


La Biblia es clara al afirmar que los hijos de Dios tenemos un ADVERSARIO espiritual que busca destruirnos mediante la estrategia astuta del engaño.

Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo

2 Corintios 3:11



EL ENGAÑO...
¡ARMA MORTAL DE SATANÁS!

Dice nuestro Señor Jesucristo, que Satanás es el padre de toda mentira.

El ha sido homicida desde el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, y padre de mentira

Juan 8:44


Porque el mismo Satanás
se disfraza como ángel de luz

2 Corintios 11:14


Algunas de las grandes mentiras de Satanás son:

Hacernos creer en la inexistencia de Dios.

Hacernos creer en la inexistencia del mundo espiritual.

Hacernos creer que todo en el universo, en la tierra y en nuestra vida personal, no existen propósitos soberanos; todo es por obra de la casualidad.

Hacernos creer que los seres humanos somos pura materia.

Hacernos creer que todo termina con la muerte física.

Hacernos creer en la falsedad de la Biblia.

Hacernos creer en su propia inexistencia.


En otras palabras, es mostrarnos lo verdadero como falso; y lo erróneo como correcto. Su especialidad es ponernos “espejismos” para que los absoluticemos por medio de nuestros sentidos, y no percibamos por el Espíritu más allá de los linderos de la creación de Dios...     Ponernos “espejismos” para que perdamos la noción de la REALIDAD de Dios, de nuestra IDENTIDAD celestial, de nuestra MISIÓN sobre la tierra y de nuestro DESTINO eterno.

Una vez se pierden esas 4 nociones fundamentales, entonces se comienza a darle rienda suelta a los deseos pecaminosos hasta desembocar en pensamientos y acciones degeneradas...     ¡Pensamientos entenebrecidos!

Eso fue lo que sucedió con la historia de la humanidad...

Porque las cosas invisibles de Dios, su eterno poder y deidad, se hacen claramente visibles desde la creación del mundo, siendo entendidas por medio de las cosas hechas, de modo que no tienen excusa. Pues habiendo conocido a Dios, no le glorificaron como a Dios, ni le dieron gracias, sino que se envanecieron en sus razonamientos, y su necio corazón fue entenebrecido. Profesando ser sabios, se hicieron necios, y cambiaron la gloria del Dios incorruptible en semejanza de imagen de hombre corruptible, de aves, de cuadrúpedos y de reptiles. Por lo cual también Dios los entregó a la inmundicia, en las concupiscencias de sus corazones, de modo que deshonraron entre sí sus propios cuerpos, ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén

Romanos 1:20-25


A esa condición de engaño es a la que Satanás ha llevado al mundo de hoy; y pretende continuar haciéndolo.

Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo

1 Juan 2:16



SED SOBRIOS Y VELAD.
1 Pedro 5:8

Es por eso, que Dios en su Palabra nos exhorta y nos advierte a que no nos dejemos “seducir” por los “espejismos” de Satanás; detrás de ellos, hay una feroz trampa mortal, que amenaza convertirnos en árboles secos e infructíferos...     ¡En vidas echadas a perder!

 “Sed sobrios, y velad; porque vuestro adversario el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar
1 Pedro 5:8


¿Cómo mantener la sobriedad espiritual?

Alimentando nuestra vida espiritual mediante la oración y la reflexión de la Palabra de Dios.

Sometiendo nuestra mente y nuestros sentidos bajo la acción sobrenatural del Espíritu Santo.

Cortando radicalmente con todo estorbo que nos impida mantener una “visión” espiritual sana.

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Al mantenernos sobrios, es como permaneceremos bajo la cobertura del Dios Altísimo, sin que ninguna estrategia astuta de engaño funcione en contra nuestra. Seremos acosados, pero NO atrapados.

Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
Romanos 8:31






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José Alfredo Liévano.

MINISTERIO
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Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra!

Porque así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te he puesto para luz de todas las gentes, a fin de que seas para salvación hasta lo último de la tierra
Hechos 13:47.

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