El panorama
mundial se está complicando en sus diversas áreas; la tendencia va hacia un
caos progresivo y generalizado. Los hechos
hablan por sí mismos justamente ahora; sin embargo, Dios ha prometido guardar a
sus hijos en medio de toda circunstancia. Si te lo dice, es porque lo hará
aunque tu lógica no encuentre explicación. ¡Créele!
“Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te
guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para
probar a los que moran sobre la tierra. He aquí, yo vengo pronto; retén lo que
tienes, para que ninguno tome tu corona”
Apocalipsis 3:10-11.
No le temas al caos.
Dios ha
prometido guiarte a través de sendas oscuras e intransitables, de protegerte
contra toda amenaza y peligro inminente, de proveerte aunque a tu alrededor no
exista ni una tan sola fuente de provisión humana; puedes tener ahora la plena
certeza que no te fallará. “Jehová es mi pastor; nada me faltará...
Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú
estarás conmigo” Salmo 23:1,4. En todo momento verás su realidad poderosa,
soberana y fiel procediendo a tu favor. No serás víctima de las circunstancias.
Aunque todo proceso destructivo avance en tu contra será revertido con solo dar
una orden. Cree y confiésalo: “El Señor es mi ayudador; no
temeré lo que me pueda hacer el hombre” Hebreos
13:6.
No acudas donde todos van para buscar su seguridad,
sino permanece donde Dios te ha puesto; es él quien te ha
elegido y te ha colocado en “ese lugar” para
que produzcas frutos independientemente a cualquier circunstancia que te rodee.
“No me elegisteis
vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis
y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca” Juan 15:16. No temas hacerlo, Dios te respaldará.
No le temas al caos.
¡No quedarás a la deriva!
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José Alfredo Liévano.
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PENSEMOS
EN DIOS
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