lunes, 28 de septiembre de 2015

LA FIESTA DE LAS PRIMICIAS.


Artículos del pastor Carlos A. Amarillo
Iglesia Bautista del Centro, Argentina.

----------------------------.


Veamos el pasaje de Levítico 23:9-14. Esta fiesta debía comenzar a celebrarse, cuando el pueblo de Dios entrase a la Tierra Prometida, y estuviesen listos para realizar la cosecha. Debían traer al sacerdote un manojo por primicia de los primeros frutos de la cosecha. El sacerdote tenía que ofrecerla a Dios para recibir de El aceptación. Era al día siguiente del día de reposo (sábado), o sea que era el primer día de la semana o sea domingo. La pascua era el día 14, el 15 era el comienzo de la fiesta de los panes sin levadura que duraba hasta el 21 (7 días), y el día 16 (domingo o 1º día de la semana) era la fiesta de las primicias. La Pascua representa el anuncio futuro de la muerte del Cordero de Dios o sea la muerte y sacrificio de Cristo Jesús. La fiesta de las primicias representa la resurrección del Señor. En 1 Corintios 15:20,23 dice: "Mas ahora Cristo ha resucitado de los muertos; primicias de los que durmieron...Pero cada uno en su debido orden: Cristo las primicias; luego los que son de Cristo, en su venida".
Cristo ascendió a los cielos el mismo día de la resurrección, y siguió apareciendo a los suyos durante 40 días más. ¿Cómo sabemos que ascendió a los cielos el mismo día que hubo resucitado? La Biblia nos da la respuesta. En Juan 20:17 dice "...no me toques, porque aún no he subido a mi Padre; mas ve a mis hermanos y diles: Subo a mi Padre y a vuestro Padre, a mi Dios y a vuestro Dios”. Allí mismo Jesús no permitió que lo tocasen. ¿Por qué? ¿Por qué tenía que decirle a María el mensaje para sus hermanos, si Él había de verlos en numerosas ocasiones? ¿Por qué no lo dio El directamente? Excepto que la ascensión referida sea la primera de todas, la misma mañana de la resurrección. En Lucas 24:39 les dice... "palpad y ved porque un espíritu no tiene carne ni huesos como veis que yo tengo". El mismo día a una prohibió que lo tocase, a otros ofreció que lo palpasen. Pero, ¿por qué querría presentarse al Padre, inmediatamente de resucitado, y con qué propósito? Jesús nunca se contradecía. Regresaba al cielo como Hijo triunfante y victorioso al hogar, no como un hijo pródigo lleno de vergüenza. Llega al cielo "las Primicias", " el Precursor", el Primero de los millones que por su obra tendrían derecho a ser parte de su "cosecha". ¿Por qué regresaba así? ¡Porque había obedecido en todo! Era el Prototipo de una gran familia que vendría tras El.
Su oración en Juan 17, donde intercede por los suyos, incluye la declaración: "He acabado la obra que me diste que hiciese" (17:4)Cristo, las primicias ¿qué fue a hacer ese día? Lo que si sabemos que fue y vino muchas veces para mantener contacto con los suyos, no estando ya limitado a paredes, ni puertas, ni obstáculo alguno a su paso. La respuesta más clara a esta pregunta la tenemos en el libro de Hebreos, capítulo 9:11-12,26; 6:19-20 y 10:19-20. Entró por nosotros, como precursor. Los sacerdotes del antiguo Israel, ofrecían sangre ajena y de animales, Jesús ofreció la propia. El, las primicias culminó su obra, entró al santuario celestial, ascendió definitivamente y sentó exaltado y glorificado en su trono de gloria.
Si Jesús ascendió a los cielos la misma mañana de su vuelta a la vida, ¿dónde estuvo los tres días (aproximadamente 36 horas), desde su muerte en la cruz, hasta su levantamiento glorioso? ¿No le había dicho al ladrón de la cruz, que estaría con El en el Paraíso (Lucas 24:43)? ¿Y desde la cruz, no manifestó: "Padre en tus manos encomiendo mi Espíritu" (Lucas 24:46)? Para responder la pregunta, pensemos ¿dónde va el creyente al morir? El cuerpo va a la tumba y el espíritu con Dios (2 Corintios 5:1-8), ausentes del cuerpo, pero presentes al Señor.  Más adelante nuestro cuerpo irá junto al Señor, cuando resucitemos (1 Tes 4:13-18). Porque Cristo es las primicias, nuestro precursor. Al morir Jesús, su espíritu fue junto al Padre, y su carne o cuerpo fue al sepulcro. 1 Pedro 3:18-19, nos dice que .. "Cristo fue a la verdad muerto a la carne, pero vivificado en espíritu, en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados". Fue a anunciarles a las fuerzas de oscuridad y tinieblas que están en prisión desde Noé (Judas 6), que Él había triunfado, y era las primicias de una gran cosecha de sus hijos, que serían beneficiados con su triunfo. Esto lo hizo antes de que su cuerpo resucitara. La presentación de su cuerpo, con las huellas de la cruz, como las verdaderas primicias en el Altar del cielo, era necesario. En espíritu no podía haberlo hecho. En 1 Corintios 15:22, dice: "Porque así como en Adán todos mueren, también en Cristo todos serán vivificados". En Adán encontramos alguien del cual heredamos la muerte, en Cristo heredamos la vida. Por eso tuvo que esperar el Señor Jesús necesariamente hasta la resurrección del cuerpo. Recién cuando se produjo la ascensión definitiva (o formal), allí fue exaltado o glorificado.
Jesús ascendió a los cielos con un cuerpo incorruptible (aún con las huellas de la cruz, 1 Corintios 15:40-44,49-53), lo mismo ocurrirá con nosotros (1 Corintios 15:54). ¿Por qué ocurrirá así? Porque las primicias anuncian una cosecha gigante del mismo carácter que la que la primicia tiene. ¿Por qué fueron necesarios 40 días de apariciones? Para animar a los suyos, demostrando que su vuelta a la vida no era una fantasía sino una realidad, por eso se apareció a Tomás, a Pedro, a los 7 que pescaban, etc. Pero también Hechos 1:3, nos dice que siguió con su tarea de enseñanza, hablándoles acerca del Reino de Dios.
Nosotros podemos cantar armoniosamente las letras de muchos himnos que dicen: "te exaltamos, te coronamos, alzamos", pero la exaltación o glorificación ya lo hizo el Padre, luego de aceptar las primicias ofrecida a través del cuerpo santo y sin pecado de nuestro Salvador.


¿En qué consiste la exaltación de nuestro Señor?

Ejercer autoridad suprema. Efesios 1:21, Colosenses 1:15-17, Mateo 28:18-20, Filipenses 2:9-11. Durante su ministerio terreno, Jesús se había limitado en razón de su encarnación al ejercicio pleno de sus poderes. Por eso si se chocaba con una puerta le dolía, tuvo hambre, tuvo que lavarse, etc. La declaración de "toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra", que registra Mateo en el final de su evangelio, tienen sentido porque Jesús había resucitado de la muerte.

Ser cabeza sobre todas las cosas de la iglesia. Efesios 1:22, 5:23, Colosenses 1:18. La iglesia le debe absoluta obediencia. Si usted no está dispuesto a obedecer, la iglesia no es su lugar. El joven rico no estuvo dispuesto a obedecer su demanda de vender todo lo que tenía y Jesús no lo obligó a hacerlo. La iglesia no es el edificio donde desarrollamos nuestro culto. La iglesia no es el cuerpo de doctrinas que nos distinguen. La iglesia somos nosotros, los que hemos sido beneficiados por la ofrenda de las primicias, que es el Cuerpo de Jesús.

Enviar dones a los hombres. Efesios 4:8. Los dones en este pasaje de Efesios, son personas o servidores especiales, que tienen como objetivo de su labor, perfeccionar a los santos para la obra del ministerio o trabajo en este mundo. Allí la lista incluye a los apóstoles, profetas, evangelistas, pastores y maestros. Para que la grey de Dios no se llene de niños fluctuantes.

Llevar adelante un trabajo de intercesión. Romanos 8:34. Esto obedece a causa de nuestra inmadurez, fragilidad, y debilidad en grado superlativo. Ya la había iniciado esta tarea durante su estadía en la tierra: "Yo he rogado por ti, para que tu fe no falte".  Lucas 22:32. "Cristo es el que murió, más aún, el que también resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros".

Ejercer su “profesión” de abogado. 1 Juan 2:1 dice: "Estas cosas os escribo para que no pequéis; si alguien hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo". En Hechos 24, tenemos el caso, donde los principales líderes religiosos judíos contrataron a un abogado llamado Tértulo, que con lisonjas aduló a el gobernador romano llamado Félix, que estaba a cargo de Pablo durante sus dos años de cautiverio en Palestina, antes de ser enviado al Cesar. Este Tértulo era un verdadero fiscal, que usó todo tipo de mentiras para conseguir su propósito. El hecho de que como cristianos contemos con la abogacía de Cristo, "no consiste en un permiso para pecar". El hecho de que tengamos un abogado que interviene siempre a nuestro favor, no nos da licencia para pecar. Esto está explicado por Pablo en Romanos 6:1-2. El hecho de saber acerca de la misericordia divina, no nos vamos a entregar a pecar sin límite, al contrario, evitaremos a toda costa de ofender a nuestro Dios. El mismo versículo de 1 Juan 2:1, incluye la sabia advertencia "para que no pequéis".

Preparar moradas celestiales. Juan 14:2. Esta fue la gran promesa en el momento donde Jesús estaba dando detalles sobre su partida, cuando sus discípulos estaban tristes por la noticia de la partida. Estas moradas son detalladas en el libro de Apocalipsis, donde se nos describe la Jerusalén Celestial.

Esperar la derrota progresiva de todos sus enemigos. 1 Corintios 15:25, Hebreos 10:12-13, Apocalipsis 11:15. "Porque preciso es que él reine hasta que haya puesto a todos sus enemigos debajo de sus pies"... "de ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies".



TWITTER.
@JAlfredoLievano



No hay comentarios: