domingo, 24 de noviembre de 2013

“DESDE ESTE DIA OS BENDECIRE”. Hageo 2:19.


Dale las gracias a Dios por esos detalles tan únicos y privilegiados que te ha mostrado con claridad a  lo largo de este día. Solo basta que "levantes" los ojos para que veas una pequeña muestra a tu alrededor.
Dale las gracias a Dios, porque así como lo hizo hoy, también lo hará mañana.
Poco a poco irás viendo como sus promesas se cumplirán al pie de la letra aun a pesar de las circunstancias adversas que te rodeen. No faltará ni un tan solo detalle en su cumplimiento. Ahora lo estás comenzando a ver y a entender...
Declara que a partir de hoy, las cosas comenzarán a ser en extremo diferentes...
Créelo...                                

------------------------------.
Dios hará surgirlo todo desde las cenizas...
------------------------------.
Lo que él te mostró hoy es una clara confirmación que sí lo puede hacer, independientemente al lugar en donde te encuentres en este momento.
Dios no depende de las circunstancias o del ambiente que te rodee para bendecirte a  “manos llenas”; es por eso que te ha llevado a ese lugar, aunque las condiciones externas no parezcan en absoluto favorables y todo empeore.
Entiende que a partir de las cenizas, Dios levantará lo que nadie pudo levantar...

------------------------------.
El proceso de tu restauración ya comenzó.
------------------------------.
Dios no te soltará y hará en ti lo que se propuso hacer contigo desde siempre...
El mismo se compromete contigo...
Su poder está sobre toda “fuerza” contraria que opere en tu contra...
Lo vas a comprobar...


"Desde este día os bendeciré".
Hageo 2:19




Twitter:
----------------------------


3 comentarios:

alvaro dijo...

Amen, lo recibo y declaro, que así sea !!! Gracias hermano José Alfredo por tu palabra de bendición para nuestras vidas, bendiciones !!

asbelgn dijo...

GRACIAS POR ESTAS PALABRAS POR FORTALECER NUESTRA FE A PESAR VER LO AL VERSO QUE EL ENEMIGO QUIERE PONER EN NUESTRO CAMINO, PERO HAY QUE CREER QUE YA DIOS LO HIZO

Unknown dijo...

Amen!!! Palabras directas del mismo corazón de Dios.