Ante todo, que la oración y la reflexión bíblica, pongan en
orden los pensamientos de confusión que hay en tu mente; necesitas que así sea,
para que veas las cosas desde una perspectiva diferente a la
"realidad" que te has fabricado.
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Dios te escuchará y te hablará.
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Para que TE escuche, háblale...
Para que LE escuches, reflexiona en su palabra...
Dios siempre escucha y habla directamente a cada uno para
darle pautas específicas a seguir. Obedece radicalmente aunque te duela, sin
cuestionarle...
Hay muchas cosas que ahora no comprendes, pero que
entenderás después.
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No temas seguir las indicaciones radicales e
ilógicas que Dios te ha ordenado.
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Dios no te ordenará algo que vaya en tu contra, aunque ahora
así lo parezca...
Cuando Dios da una orden, es necesario acatarla sin
condiciones, aunque no te guste, te entristezca o no la entiendas. (Ver ejemplo de Abraham e Isaac en Génesis 22)
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Dios jamás te permitirá dar un paso
equivocado, aunque tú pienses que lo es...
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Cuando des el siguiente paso que Dios te ha ordenado dar,
tendrás el camino adecuado y preparado para continuar; De eso se tratan los
"pasos de fe y obediencia”, y si te has dado cuenta, Dios te está probando
en ello.
Antes que tú llegues a un lugar, ya Dios te ha preparado
cuidadosamente todos los detalles.
Tú, solamente avanza en obediencia a SU voluntad...
Dios te está enseñando a obedecerle sin condiciones y sin
explicaciones lógicas; los métodos que él usa para llevar a cabo sus propósitos,
van más allá de toda lógica humana.
Aférrate a Dios aunque la tempestad arremeta con fuerza en
tu contra. No te sueltes aunque las olas te golpeen; Dios siempre irá delante
de ti...
“Encomienda a Jehová tu camino, y confía en él; y él hará”.
Salmo 37:5
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