NO SERA EL 21 DE DICIEMBRE DE 2012.

Cuando Jesús hizo referencia de su retorno a la tierra, dijo:

Pero de aquel día y de la hora nadie sabe, ni aun los ángeles que están en el cielo, ni el Hijo, sino el Padre. Mirad, velad y orad; porque no sabéis cuándo será el tiempo.

Marcos 13:32-33

Pero lo que sí dio, fueron las señales previas a su regreso, tales como:

El aparecimiento falsos líderes religiosos y predicadores con toda clase de heréticas enseñanzas. Por ejemplo, uno de tantos y más recientes: ¿Qué decir del cristianismo “gay” con su reciente edición de la Biblia King James? Increíble, falsos profetas sodomizados.

Incremento de guerras y rumores de guerras a nivel mundial. Es impresionante el armamento destructivo y sofisticado con que cuentan las grandes potencias mundiales, y que en un solo momento pudieran acabar con toda la población mundial. El mundo está amenazado con una guerra nuclear de grandes dimensiones. ¿Qué decir por ejemplo de Irán, Siria, Rusia, Israel, Irak, Corea del Norte y China entre otros? ¿Estamos al tanto de las noticias que giran en torno a estos países? ¿Hacia dónde lleva todo esto?

Incremento de las enfermedades generalizadas. Una de ellas el SIDA; ¿Y qué decir de aquellas que están siendo ocasionadas por los efectos del deterioro de la capa de ozono y por el uso artefactos con alto potencial radiactivo? Poco a poco se irá viendo su incremento a lo largo y ancho de todo el mundo.

Incremento de los terremotos en diversas partes del mundo. Estudios realizados por los geólogos han demostrado que cada vez va aumentando la intensidad y la frecuencia de los sismos a lo largo del globo terráqueo. El apocalipsis nos anuncia un terremoto a nivel mundial sin precedentes en la historia de la humanidad.

Persecución y muerte a los cristianos. Véase como en algunos países del medio oriente y Asia esto se está cumpliendo.

Multiplicación de la maldad en todas sus manifestaciones. ¿Qué decir del reciente asesinato de niños en la Escuela Primaria de Estados Unidos? Esto y centenares de muchas cosas que pudiéramos enumerar, tales como: secuestros, corrupción, inmoralidad, desenfreno sexual, pedofilia, irrespeto de los hijos a los padres, rebeldía, homicidios, satanismo y mucho más. Únicamente lea el periódico o vea los noticieros de cada día para darse cuenta.  

La predicación del evangelio en todos los rincones del mundo. Cuando nuestro Señor Jesucristo predijo que el evangelio sería anunciado sobre toda la tierra, humanamente hablando era imposible que eso sucediera; sin embargo, después de 21 siglos, en medio de toda oposición su palabra se cumplió.  Cuando esto suceda, entonces, como él lo anunció, vendrá el fin. (Ver profecía abajo y resaltada)

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Copio a continuación las palabras textuales de nuestro Señor Jesucristo con respecto a las señales previas a su regreso:

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Respondiendo Jesús, les dijo: Mirad que nadie os engañe. Porque vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo; y a muchos engañarán. Y oiréis de guerras y rumores de guerras; mirad que no os turbéis, porque es necesario que todo esto acontezca; pero aún no es el fin. Porque se levantará nación contra nación, y reino contra reino; y habrá pestes, y hambres, y terremotos en diferentes lugares. Y todo esto será principio de dolores. Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre. Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán. Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin.

Mateo 24: 4-14

Estamos viendo las señales...

Nunca en la historia de la humanidad se habían visto con tanta claridad.

Además, hay otra gran señal que está presente ante nuestros ojos: El resurgimiento del Estado de Israel en el año 1948. Esto es una evidencia contundente de que el tiempo está muy cerca, cuando “la higuera” comience a florecer...

De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas.

Mateo 24:32-33

Estamos en los tiempos justos, pues a partir del año 1948 la profecía de Israel se cumplió, y ahora en nuestros días el evangelio ha cubierto el mundo entero. Ya todo está listo, para que en cualquier momento todo esto suceda. ¡No será el 21 de diciembre de 2012! Puede ser en cualquier otro día que no sabemos, pero entendamos que nunca todas las señales habían estado en consonancia. ¡Todo será repentino! ¡Cuando nadie lo espere! Así como en los días de Noé, en los que nadie era consciente de las advertencias de Dios y vivían al día a día en sus afanes y diversiones. (Así como hoy)

Mira lo que continua diciendo nuestro Señor Jesucristo:

Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre. Entonces estarán dos en el campo; el uno será tomado, y el otro será dejado. Dos mujeres estarán moliendo en un molino; la una será tomada, y la otra será dejada.

Mateo 24:37-41

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¿Qué nos toca hacer entonces?

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Nos toca permanecer atentos a la Palabra de Dios para vivir de acuerdo a sus lineamientos y sirviéndole en el lugar donde nos ha encomendado. En otras palabras nos corresponde llevar una vida de santidad y compromiso en medio de este mundo perdido.

El Señor nos dice ahora:

Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha de venir vuestro Señor. Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa. Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis. ¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su casa para que les dé el alimento a tiempo? Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así. De cierto os digo que sobre todos sus bienes le pondrá. Pero si aquel siervo malo dijere en su corazón: Mi señor tarda en venir; y comenzare a golpear a sus consiervos, y aun a comer y a beber con los borrachos, vendrá el señor de aquel siervo en día que éste no espera, y a la hora que no sabe, y lo castigará duramente, y pondrá su parte con los hipócritas; allí será el lloro y el crujir de dientes.

Mateo 24: 42-51

Cuando Dios nos repita algo, ¡Atentos!, algo nos quiere decir...

No hemos de pasar desapercibida esa Palabra que insistentemente nos muestra en medio del marco profético que estamos viviendo en estos tiempos...

Dios está mostrando ahora que las “grietas de la tierra” ya se están abriendo para dar paso a los grandes juicios que se desatarán sobre ella como consecuencia de la maldad deliberada de los hombres. El tiempo está llegando a su fin...

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¡Cristo viene a juzgar al mundo y a recoger a sus escogidos!

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E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo, y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran gloria. Y enviará sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos, de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.

Mateo 24:29-31.

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