Se perciben a lo largo de todo el mundo sombras oscuras de maldad y doctrinas infernales que lo están llevando al caos, a la confusión generalizada y a la autodestrucción. Esto sucede ahora mismo, y como que casi nadie se ha percatado de ello.
Pero las cosas así están...
Esta es la realidad hoy...
Y nosotros los cristianos...
¿Qué hacemos al respecto?
Es precisamente en este entorno, donde nos corresponde esparcir la LUZ en medio de las sombras que son cada vez más intensas.
Ese es nuestro deber y compromiso.
Nuestro Señor Jesucristo nos lo recuerda:
Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder.
Mateo 5:14
¡ESCUCHA!... ¡MIRA!...
Es nuestro deber AHORA, mantener abiertos los oídos espirituales para captar el mensaje que Dios nos está dando por medio de su Palabra...
Es nuestro deber AHORA, mantener abiertos los ojos espirituales para ver e interpretar a la luz de la Palabra de Dios, los tiempos actuales.
ES NUESTRO DEBER AHORA, ESPARCIR LA LUZ.
No se puede evadir el compromiso...
Somos responsables de hacerlo.
¿Cómo se logra?
Manteniendo viva nuestra relación con Dios por medio de la oración, la reflexión de su palabra y mediante una vida limpia de toda interferencia entre él y nosotros.
Los tiempos actuales son muy propensos para hacernos perder la noción de la realidad de Dios, la noción de nuestra identidad espiritual, la razón de nuestra misión en el mundo y de nuestro destino eterno...
¡ESCUCHA!... ¡MIRA!...
AHORA ES EL TIEMPO DE ESPARCIR LA LUZ.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
Mateo 5:16
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