Lo que constantemente necesitamos en
nuestra vida cristiana es...
Crecimiento espiritual.
Guía espiritual.
Fortaleza espiritual.
Crecimiento espiritual.
Es necesario crecer espiritualmente,
y tal crecimiento tiene su punto de partida mediante la iluminación
producida por el Espíritu de Dios obrando en nuestra mente.
Al ser iluminados por la potente LUZ
del Espíritu Santo es cuando se produce el verdadero conocimiento que ningún método
científico es capaz de proporcionar; tal era el anhelo del apóstol Pablo al
escribir a la iglesia de Colosas:
“... que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda sabiduría e
inteligencia espiritual para que andéis como es digno del Señor, agradándole en
todo, llevando fruto en toda buena obra y creciendo en el conocimiento de Dios...”
Colosenses
1:9-10
Así es... “creciendo en el conocimiento de Dios”;
en este texto se nos habla de una acción continua que hemos de cultivar
mediante la reflexión diaria de la Palabra de Dios, trayendo como resultado
convicciones firmes en su contenido, discernimiento para aplicarla y el deseo espontáneo
de vivirla; es por ello que el salmo 119 dice:
“La exposición de
tus palabras alumbra;
Hace entender a los simples”
Salmo
119:130
Guía espiritual.
Necesitamos de la guía constante del
Espíritu Santo que nos dé el discernimiento suficiente para que sepamos qué
hacer y cómo proceder ante cada situación que se nos presente en la
vida diaria; para que sepamos hacia dónde dirigirnos en el cumplimiento de
nuestra misión sobre la tierra, para no tomar decisiones precipitadas y
equivocadas.
Necesitamos mantener una conexión permanente
con el Espíritu Santo para que su acción influya sobre nuestras decisiones y deseos.
¿Cómo mantenerla? Mediante la oración y la reflexión diaria de la Palabra de
Dios (nuestro manual de instrucciones).
Necesitamos mantener la atención constante
en todos nuestros acontecimientos, para que podamos ver aquellas puertas que
Dios nos abre y aquellas que nos cierra.
“Examíname, oh Dios... Y ve si
hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno”
Salmo
139:23-24
Fortaleza espiritual.
Necesitamos que el Espíritu Santo nos
mantenga fuertes ante las pruebas y tentaciones que la vida nos presente; hemos
comprobado a lo largo de nuestro peregrinar terrenal lo vulnerables que somos
ante todo tipo de viento contrario, que en nuestras fuerzas y
capacidades somos inútiles para enfrentarlos.
Necesitamos nutrir nuestra alma con
la Palabra de Dios y con la oración; no se puede de otra manera.
“Escrito está: No sólo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que
sale de la boca de Dios”
Mateo 4:4
“Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad
está dispuesto, pero la carne es débil”
Mateo
26:41
Crecimiento espiritual.
Guía espiritual.
Fortaleza espiritual.
Tres necesidades constantes en la
vida de todo cristiano que únicamente pueden suplirse mediante la reflexión de
la Palabra de Dios y la oración; al hacerlo, el Espíritu Santo ejerce su acción
eficaz en nuestros pensamientos, emociones y voluntad.
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José Alfredo Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra!
“Porque
así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te he puesto para luz de todas las
gentes, a fin de que seas para salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.
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José Alfredo Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra!
“Porque
así nos ha mandado el Señor, diciendo: Te he puesto para luz de todas las
gentes, a fin de que seas para salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.