El tiempo que tienes en
esta tierra está limitado por los años que Dios te ha concedido vivir sobre
ella; por lo tanto es muy importante aprovecharlo al máximo en la misión que se
te ha encomendado. Tienes además los recursos y tus capacidades; nada menos en
estos días recientes lo has comprobado y has visto el increíble respaldo que
has tenido por parte de Dios.
Todos los eventos que
Dios ha permitido son parte del gran propósito que tiene para tu vida. No para
que te envanezcas por tus logros, sino para que su mensaje se propague hasta el
último rincón del mundo, inclusive.
Aunque parezca ínfimo lo que haces, para Dios es una acción estratégica al
emplearte a ti para ello. Tienes por ejemplo a tu disposición
“Facebook”, “Twitter” y todo tipo de
redes sociales para que por medio de ellas compartas su mensaje. Aparte de
otros medios y oportunidades que ha puesto en tus manos.
Aun a pesar de sentirte
con muchas limitaciones de todo tipo, Dios está haciendo muchas cosas
ilimitadas. Eres el medio que Dios necesita
para cumplir sus propósitos. Sí. Exactamente tú, así con esa cantidad
enorme de limitaciones y defectos.
No lo puedes creer o
aceptar, pero así es...
Dios llegó primero a buscarte
y a “salvarte, pero también para “contratarte” como un efectivo medio de bendición
para otras personas.
Lo que Dios ha dicho de
ti, lo hará, pese a tu inexperiencia y deméritos. Lo hace por GRACIA y para
mostrar en ti su poder.
Dios quiere cumplir el propósito
por el que te trajo al mundo, y de hecho lo hará, así como lo hizo con Jeremías.
Mira la historia:
“Vino, pues,
palabra de Jehová a mí, diciendo: Antes que te formase en el vientre te conocí,
y antes que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las naciones.
Y yo dije: ¡Ah!
¡Ah!, ¡Señor Jehová! He aquí, no sé hablar, porque soy niño.
Y me dijo Jehová:
No digas: Soy un niño; porque a todo lo que te envíe irás tú, y dirás todo lo
que te mande. No temas delante de ellos, porque contigo estoy para librarte,
dice Jehová.
Y extendió
Jehová su mano y tocó mi boca, y me dijo Jehová: He aquí he puesto mis palabras
en tu boca.”
Jeremías 1:4-9
Desde antes que
nacieras Dios ya había pensado en ti para emplearte como su portavoz sobre la
tierra. Para que testificaras de su Gracia, de su Misericordia, de su Poder y
de su Soberanía. No necesitas de un púlpito para hacerlo o tener un cargo
ministerial, es donde él en su misericordia te ha colocado.
Estás donde Dios quiere
que estés, para ese propósito te llevó allí. No para que te olvidaras de él y
vivieras una vida sin sentido.
No tienes excusas para
evadir su llamado, pues cuentas con la presencia del Espíritu Santo en tu interior,
quien te capacita para ello así como lo ha prometido. Mira la promesa que hizo
a sus seguidores:
“Pero
recibiréis poder, cuando haya venido
sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda
Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.”
Hechos 1:8.
Se necesita valentía y
perseverancia para enfrentarnos a un mundo que rotundamente le ha dicho “no” a
Dios.
Se necesita valentía y
perseverancia para enfrentarnos a muchos que dicen llamarse “cristianos” pero que
han amoldado su estilo de vida a criterios que se oponen a lo que nuestro Señor
Jesucristo enseñó.
Se necesita valentía y
perseverancia para denunciar a aquellos “siervos de Dios” que usan su
ministerio para enriquecer sus bolsillos, para ganar fama y vanagloria, en
donde lo prioritario en ellos es la ganancia material antes que la espiritual.
(Alarmante como se han invertido los valores)
Se necesita valentía y
perseverancia para “decir lo que Dios
dice” y no lo que “el mundo dice”...
Estamos viviendo tiempos en los que el amor se
ha enfriado y la maldad con sus tentáculos ha aprisionado al mundo. Son tiempos
de mucha oscuridad en que la LUZ DE CRISTO quiere ser apagada por los
ventarrones de las falsas doctrinas y estilos de vida inmorales y antiéticos...
Eres el medio que Dios necesita para cumplir sus propósitos en medio de
la oscuridad.
Dios quiere que seas
como un potente faro que alumbre y re-oriente los caminos de aquellos que
incluso un día habían tomado el camino correcto.
Dios quiere que “con la
biblia en la mano” demuestres con autoridad como deben ser las cosas y no como
el mundo quiere que sean.
Eres el medio que Dios necesita para cumplir sus propósitos en medio de
los tiempos previos al segundo regreso de Cristo.
Dios quiere que en
medio de estas señales claras y evidentes que anuncian su pronto regreso,
cumplas con la labor que te ha encomendado. No es casualidad que vivas en esta época tan
convulsionada. Es para ese propósito.
Sería una lástima que
te echaras a perder, al no producir frutos. Sin embargo la oportunidad y el
recordatorio de Dios sigue insistente y constante...
Eres el medio que Dios necesita para cumplir sus propósitos. Ponte ahora
bajo sus órdenes así como lo hizo Isaías y el apóstol Pablo.
“Heme aquí, envíame a mí.”
Isaías 6:8
“Señor, ¿qué quieres que yo haga?”
Hechos 9:6
Ora así y Dios se
encargará del resto.
De hecho sí que tomará
en serio tu consagración.
Cree ahora que hará de
ti un árbol que produzca muchos frutos aunque ahora veas en todo lo contrario.
Eres el medio que Dios necesita para cumplir sus propósitos. Para que
seas influencia positiva con tus palabras y testimonio ante las demás personas.
No lo olvides ...
José Alfredo Liévano
Twitter. @JAlfredoLievano
--------------------------.