“Desde los cielos te
hizo oír su voz, para enseñarte”
Deuteronomio 4:36
NO OLVIDES LO QUE DIOS TE CONFIRMO.
Le perteneces desde
toda la eternidad.
Te ha creado para
sus propósitos.
Te salvó de la condenación
por medio del
sacrificio de Jesucristo.
Te ha equipado con
sus dones para
que difundas su
Palabra.
No permitirá que al
final de tus días terrenales
conozcas la frustración.
PERO ES NECESARIO QUE NO ATRASES
SU PROCESO DE RESTAURACION.
SU PROCESO DE RESTAURACION.
Es importante que no atrases el proceso de restauración que Dios está
operando en tu vida; cada vez que procedes contrariamente a su Palabra, generas
consecuencias en las que su disciplina dolorosa interviene para enderezarte.
“Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando
eres reprendido por él; porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo
el que recibe por hijo.
Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué
hijo es aquel a quien el padre no disciplina? Pero si se os deja sin
disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y
no hijos.
Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos
disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre
de los espíritus, y viviremos? Y aquéllos, ciertamente por pocos días nos
disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo que nos es
provechoso, para que participemos de su santidad.
Es verdad que ninguna disciplina al presente parece ser causa de gozo,
sino de tristeza; pero después da fruto apacible de justicia a los que en ella
han sido ejercitados”
Hebreos 12:5-11
Apártate de todo aquello que estorbe el cumplimiento de los propósitos eternos
de Dios; tú sabes de quienes necesitas alejarte y lo que no debes seguir
tolerando con tus acciones.
“Y no participéis en
las obras infructuosas de las tinieblas,
sino más bien
reprendedlas”
Efesios 5:11
No te fíes en lo aparente, no te dejes impresionar por los “escenarios”
atractivos y seductores que el mundo te ofrece, son trampas bien elaboradas por
las huestes infernales de maldad para que no lleves una vida victoriosa en
Cristo.
“No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama
al mundo, el amor del Padre no está en él.
Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos
de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo.
Y el mundo pasa, y sus deseos; pero el que hace la voluntad de Dios
permanece para siempre”
1 Juan 2:15-17
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José Alfredo Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje
de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la
tierra!
“Porque así nos ha mandado el Señor,
diciendo: Te he puesto para luz de todas las gentes, a fin de que seas para
salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.
1 comentario:
Nunca olvidaré lo que el señor hizo por mí cuando estaba tan solo y nadie sabía de mi angustia.... el me rescato y me dio su palabra y su amor.tambien descubrí un día que estaba muy triste este blog y me sirvió de mucho; hace más de tres años ya.... gracias señor.
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