Sin duda
alguna, estamos viviendo en los tiempos previos a la segunda venida de Jesucristo;
es importante poner atención a los diversos anuncios y advertencias del cielo que
coinciden con tal evento...
¡No es casualidad que esto pase ahora!
¡Dios lo está confirmando otra vez!
¡Dios lo está recordando!
¡Ya estaba anunciado!
Obviamente que
no sabemos ni el día, ni la hora; pero las señales son cada vez, más que
evidentes... ¡No se pueden obviar!
“EL SEÑOR EJECUTARA SU SENTENCIA SOBRE
LA TIERRA EN JUSTICIA Y CON PRONTITUD”
Rom. 9:28
Jesucristo
vendrá a la tierra a derramar sus juicios; pronto el Sol de Justicia aparecerá
entre las nubes, pero antes de que todo esto suceda, los tiempos se pondrán aún
más oscuros y convulsos.
“E inmediatamente después de la tribulación de aquellos días, el sol se
oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas caerán del cielo,
y las potencias de los cielos serán conmovidas. Entonces aparecerá la señal del Hijo del
Hombre en el cielo; y entonces lamentarán todas las tribus de la tierra, y
verán al Hijo del Hombre viniendo sobre las nubes del cielo, con poder y gran
gloria. Y enviará sus ángeles con
gran voz de trompeta, y juntarán a sus escogidos desde, de los cuatro vientos,
desde un extremo del cielo hasta el otro”
Mateo 24:29-31
ANTES DE QUE LA SENTENCIA DE DIOS SEA
EJECUTADA SOBRE LA TIERRA.
¿Qué debemos hacer?
Dios nos ha
encomendado la tarea de difundir su Palabra hasta lo último de la tierra, y más
ahora que las señales de su regreso son más que evidentes. Es necesario que
estemos conscientes de ello, y utilicemos todos los medios posibles a nuestro
alcance para hacerlo.
“Y será predicado este evangelio del Reino en todo el
mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”
Mateo 24:14
...
y la orden del Señor para propagarlo es clara y contundente...
“Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”
Marcos 16:15
Se trata de un
gran privilegio, pero a la vez de una enorme responsabilidad, ya que para eso
nos ha traído Dios a la tierra... ¡No
debemos callar!
Incapaces e
indignos de cumplir con esta gran tarea, somos todos, por eso pidámosle al
Señor que con su Espíritu nos capacite con su poder sobrenatural.
Necesitamos
CONVICCIONES firmes en la Palabra de Dios...
Necesitamos
corazones COMPASIVOS ante la condición deplorable del mundo…
Necesitamos
corazones SOLIDARIOS para enfocarnos en las necesidades diversas del prójimo...
Necesitamos
VALOR y DETERMINACION para decir las cosas como deben de ser...
Necesitamos
ser PERSEVERANTES aunque no veamos resultados favorables...
Necesitamos
REFLEJAR con espontaneidad una vida cristiana genuina en medio de un mundo
lleno de falsedad e hipocresía...
El mundo “se
cae a pedazos” como consecuencia de la maldad que en él se practica; no podemos
permanecer indiferentes e inactivos ante esta alarmante situación.
EL TIEMPO ESTA CERCANO...
El juicio divino es inminente.
Pongámonos bajo las órdenes de Dios.
Hemos nacido en tiempos profetizados.
“Heme aquí, envíame a mí”
Isaías
6:8
---------------.
José Alfredo
Liévano.
MINISTERIO
PENSEMOS EN DIOS.
Difundiendo el mensaje de Jesucristo.
¡Hasta lo último de la tierra!
“Porque así nos ha mandado el Señor,
diciendo: Te he puesto para luz de todas las gentes, a fin de que seas para
salvación hasta lo último de la tierra”
Hechos 13:47.
Usa tus redes
sociales para ese propósito...
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