¡No hay excusas!
Has visto el poder soberano de Dios.
Lo has comprobado ante situaciones específicas vividas a lo largo de
toda tu historia personal. Es imposible tanto “hecho casual” uno tras otro; has
visto tantas puertas selladas abrirse e inamovibles obstáculos derribarse.
Tienes tanto que recordar y testificar al respecto...
Has comprendido
que...
¡No dependes del dinero!
¡No dependes de los recursos!
¡No dependes de las personas!
¡No dependes de las circunstancias!
Has comprendido que
Dios, por ser el creador del universo y de todo cuanto en él hay, es el dueño
absoluto de todo lo que existe.
“De
Jehová es la tierra y su plenitud; El mundo, y los que en él habitan”
Salmo 24:1.
Has comprendido que
Dios está sobre todo lo que el mundo considera
grande y poderoso; que nada ni nadie lo supera... Has comprendido que la protección y provisión
que necesitas ahora provienen de él, no de las cosas creadas... Has comprendido que no hay dificultad que
no puedas superar, a menos que sea con su intervención poderosa y soberana.
“Alzaré
mis ojos a los montes; ¿De dónde vendrá mi socorro? Mi socorro viene de Jehová,
que hizo los cielos y la tierra”
Salmo 121:1-2.
Has comprendido que
la presencia real y activa de Dios te envuelve ahora, en este instante; por
eso, al igual que el apóstol Pablo puedes decir ahora con certeza:
“Pues
he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir
humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así
para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para
padecer necesidad. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”
Filipenses 4:11-13.
Has comprendido que
la realidad del Dios Vivo supera todo concepto lógico y natural; que es
imposible encasillarlo en tus patrones mentales y que sus palabras reveladas van
allá de toda comprensión.
“¡Oh
profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán
insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién
entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él
primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son
todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén”
Romanos 11:33-36
Mantén los ojos abiertos...
Fíjate bien en lo que Dios está haciendo ahora en medio de tus
circunstancias presentes; su realidad eterna, viva, poderosa, soberana y fiel
está obrando de manera personalizada.
¡No hay razón para dudar!
¡No hay razón para temer!
¡No hay razón para angustiarse!
¡No hay razón para desesperarse!
¡No hay razón para desobedecerle!
¡Dios es real!
¡Es tu Dios!
¡No lo sustituyas!
¡No se vale dudar!
“Yo
soy Jehová tu Dios”
Éxodo 20:2
-----------------------------------
José Alfredo Liévano
PENSEMOS EN DIOS
@JAlfredoLievano
-----------------------------------
No hay comentarios:
Publicar un comentario