lunes, 30 de noviembre de 2015

¡ENFOCATE EN LO ETERNO!


Acuérdate de todas las intervenciones oportunas y milagrosas de Dios a lo largo de tu peregrinaje sobre la tierra. Nada te ha salido por suerte; todo ha sido perfectamente sincronizado por su poder y soberanía. ¡Más evidente no puede ser! Por lo tanto, no pierdas la noción de su “REALIDAD ACTIVA” a tu favor; él siempre te ha respaldado, protegido y provisto. Tu vida no está confinada dentro de las paredes de calabozos oscuros regidos por las fuerzas ciegas de los acontecimientos.   No dudes más. Descansa en la realidad eterna, poderosa, soberana y veraz de Dios aunque no entiendas porque tienen que suceder ciertas cosas.

Acuérdate de esos momentos únicos en los que Dios te ha hablado directamente al reflexionar en su Palabra. Su instrucción ha sido tan oportuna que no queda espacio para la duda. Eso no puede ser casualidad.   Pídele que te ayude a discernir su Palabra, verás cómo tu fe se fortalecerá y tus temores se disiparán.

No temas enfocarte en las prioridades del Reino de Dios, pues es el único propósito por el cual tú vives en la tierra. Enfócate en lo eterno, lo demás aquí se queda por muy arraigado que lo tengas.

Enfócate en lo eterno alimentándote con la Palabra de Dios, apártate de todo aquello que te haga desobedecerla y cumple con la misión de iluminar tu entorno con su luz.


¡ENFOCATE EN LO ETERNO!
No será en vano.


“Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano”

1 Corintios 15:58




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sábado, 28 de noviembre de 2015

UN NUEVO INICIO...


Nadie boicoteará los designios eternos que Dios tiene para ti. Vivirás para lo que naciste; esa es la razón por la que ahora estás enmedio de procesos dolorosos e incomprensibles. Dios está puliendo tu lámpara...  
No es tan tarde como piensas. Lo que ahora parece ser el final, será el inicio de algo grande y trascendente. Lo que se echó a perder en su totalidad tendrá soluciones inesperadas, milagrosas y oportunas.
Dios tiene un nuevo inicio para tu vida, ya dio la orden para que así sea. Se trata de una restauración total. No te preguntes como hará, solamente CREE y ESPERA. Después lo comprenderás bajo la luz de su Palabra, entenderás que tus acontecimientos son siempre gobernados por su soberanía y serás evidencia indiscutible de su poder sobrenatural ante los ojos de todos.

“¿No te he dicho que si crees verás la Gloria de Dios?”
Juan 11:40


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martes, 24 de noviembre de 2015

EDIFICADORES DEL REINO DE DIOS.

La razón fundamental por la que los cristianos estamos en el mundo es para sembrar la Palabra de Dios en el lugar donde nos ha colocado. No existe otra razón prioritaria. Somos elegidos por él para que edifiquemos su Reino sobre la tierra. Los dones, capacidades y recursos adquiridos son para ese propósito. ¡Qué gran privilegio!

Muchos dicen: “Sin duda alguna no reúno ni un tan solo requisito, ya es demasiado tarde, no dispongo de recursos favorables y carezco de toda experiencia; creo que para Dios estoy descalificado(a)”  Sin embargo, Dios nos continúa  tomando en cuenta para sus propósitos eternos. Él no mira nuestros inconvenientes y ataduras, sino el enorme potencial que hemos guardado durante años. No tiene sentido vivir en otro propósito diferente, eso implicaría desperdiciar nuestros años.

Pongámonos bajo las órdenes incondicionales de Dios para ser edificadores de su Reino en nuestro contexto actual; al hacerlo, todas las interferencias externas e internas serán quitadas y todos nuestros acontecimientos encajarán perfectamente en el tiempo y lugar apropiado.

“HEME AQUÍ SEÑOR, ENVÍAME A MI.”
Isaías 6:8


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domingo, 22 de noviembre de 2015

LOS CRISTIANOS ANTE LA MALDAD LEGALIZADA.


La mayor parte de los gobiernos del mundo han desechado la autoridad de Cristo al promulgar leyes contrarias a su Palabra; esto ha facilitado la práctica de la maldad en todas sus formas. Sin duda alguna estamos viviendo en los días de Noé y en los días de Sodoma, así tal y como nuestro Señor Jesucristo lo predijo. LA MALDAD SE HA LEGALIZADO y en este contexto hemos de apegarnos a los principios que Dios ha establecido en sus leyes. Vendrán tiempos en que los genuinos cristianos irán a la cárcel o se le suprimirán sus derechos ciudadanos por defender los principios bíblicos; de hecho ya estamos viendo varios casos.
Es imperativo que los cristianos procedamos con la valentía de obedecer a Dios antes que a los hombres, que saquemos a la luz las acciones malignas cometidas e invitemos al arrepentimiento sin temer a las circunstancias o a la opinión pública.  
No se puede negar que el mundo se está ahora inundando con las aguas inmundas de maldad; Dios no ignora todas las intenciones y acciones deliberadas que se hacen a “sus espaldas” y por eso advierte sobre terribles las consecuencias que se avecinan sobre todas las naciones de la tierra. El tiempo de escapar del juicio venidero es hoy, el tiempo para refugiarse en el “arca” de salvación (Jesucristo) es hoy. “Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre.” Mateo 24:37. Pronto, el juicio de Dios sobre las naciones será una realidad...


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viernes, 20 de noviembre de 2015

APRENDE A DESCANSAR EN DIOS.


Tu vida no está abandonada bajo las fuerzas ciegas de la suerte sino que está envuelta en la REALIDAD eterna, poderosa y soberana de Dios. “Porque en él vivimos, y nos movemos, y somos”. Hechos 17:28. Aunque no lo veas y no lo sientas, enmedio de las tempestades que te azotan, su presencia activa te envuelve de continuo. Él sabe en qué momento dar la orden para que los vientos contrarios se calmen.

No dudes de la realidad de Dios cuando estés en medio de las tentaciones y adversidades. No te dejes influir por el criterio de la mayoría, no busques otras opciones “lógicas” y “convenientes” para salir de la crisis, eso te hundirá más. Desecha todo consejo que se oponga a lo que Dios ha establecido aunque tengas que pagar un precio muy alto de rechazo. Es en esos momentos cuando Dios debe ser tu prioridad. Él ha prometido defenderte, necesitas creerlo. “Jehová está conmigo; no temeré lo que me pueda hacer el hombre”. Salmo 118:6.

DESCANSA EN DIOS.
Descansa en Dios aunque el tiempo te haya cerrado las puertas y las oportunidades.
Descansa en Dios aunque todos te hayan olvidado.
Descansa en Dios aunque ahora estés en la bóveda más oscura y profunda.
Descansa en Dios aunque todo y todos se te hayan vuelto en tu contra.
Descansa en Dios creyéndole, obedeciéndole y esperando. Él te tiene todo preparado desde el principio.


¡APRENDE A DESCANSAR EN DIOS!
No olvides que las convicciones firmes en su Palabra se desarrollan y fortalecen en las adversidades.




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jueves, 19 de noviembre de 2015

CEGUERA Y PARÁLISIS ESPIRITUAL.


La ausencia de convicciones firmes en la Palabra de Dios produce ceguera y parálisis espiritual; sus severas consecuencias se manifiestan en una vida cristiana improductiva y destructiva.

Para adquirir convicciones firmes en la Palabra de Dios es necesario exponerse a su contenido; su LUZ SOBRENATURAL saturará los pensamientos entenebrecidos y sanará la ceguera. Dice el Salmo 119:130 “La exposición de tus palabras alumbra, hace entender a los simples”. Es necesario invertir tiempo cada día para exponerse a la revelación bíblica en un clima de oración.

Las convicciones firmes en la Palabra de Dios, dadas por el Espíritu Santo te impulsarán a proceder espontáneamente de acuerdo a sus principios revelados; la parálisis espiritual será sanada y tu vida cristiana será productiva y abundante. “Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad”. Filipenses 2:13.

Dios quiere y puede revertir el proceso ocasionado por tu ceguera y parálisis espiritual.  
Dios quiere y puede revertir el proceso destructivo que amenaza hundirte para siempre.  

Pídele que lo haga...
Ora mucho y no dejes de exponerte a su Palabra...



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miércoles, 18 de noviembre de 2015

SIEMPRE ESTAS EN MANOS DE DIOS.


Dios te conoce desde siempre, aun desde antes que creara el universo; tiene un conocimiento amplio y específico de tu biografía. Nada de ti está oculto ante él.   Oh Jehová, tú me has examinado y conocido. Tú has conocido mi sentarme y mi levantarme; has entendido desde lejos mis pensamientos. Has escudriñado mi andar y mi reposo, y todos mis caminos te son conocidos. Pues aún no está la palabra en mi lengua y he aquí, oh Jehová, tú la sabes toda. Detrás y delante me rodeaste, y sobre mí pusiste tu mano. Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; alto es, no lo puedo comprender. Salmo 139:1-6.  Dios conoce tu historia de principio a fin. Te vio cuando estabas en el vientre materno, estuvo pendiente de tus primeros pasos y de todos los que posteriormente darías en cada etapa de tu vida. Conoce tus decisiones equivocadas, así como sus consecuencias.   Entiende perfectamente tus frustraciones y tus éxitos.   Sabe cuáles son tus debilidades y tus fortalezas.   En fin, no hay nada que desconozca de ti. Conoce tu record.   No hay nada oculto ante su presencia. Te conoce desde toda la eternidad; y a pesar de este conocimiento tomó la iniciativa para constituirte en una “lámpara luminosa”, para que con su luz alumbres el mundo. “Vosotros sois la luz del mundo; una ciudad asentada sobre un monte no se puede esconder. Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y alumbra a todos los que están en casa. Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos”. Mateo 5:14-16. Esa  es la razón fundamental por la que te creó. No hay otra que la supere; sin embargo, este honroso privilegio no termina aquí, va más allá de las fronteras del tiempo y del espacio.   Te eligió para que vivieras en unión con él para siempre. El Espíritu mismo da testimonio a nuestro espíritu, de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados...   Porque a los que antes conoció, también los predestinó para que fuesen hechos conformes a la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos. Y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también justificó; y a los que justificó, a éstos también glorificó” Romanos 8:16-17, 29-30.

Dios ha prometido que sus escogidos no se echarán a perder; aunque para ello tengan que pasar por procesos disciplinarios intensos y dolorosos; aunque al igual que el “hijo pródigo” tengan que comer de las algarrobas de los cerdos. “Y habéis ya olvidado la exhortación que como a hijos se os dirige, diciendo: Hijo mío, no menosprecies la disciplina del Señor, ni desmayes cuando eres reprendido por él; porque el Señor al que ama, disciplina, y azota a todo el que recibe por hijo. Si soportáis la disciplina, Dios os trata como a hijos; porque ¿qué hijo es aquel a quien el padre no disciplina? Pero si se os deja sin disciplina, de la cual todos han sido participantes, entonces sois bastardos, y no hijos. Por otra parte, tuvimos a nuestros padres terrenales que nos disciplinaban, y los venerábamos. ¿Por qué no obedeceremos mucho mejor al Padre de los espíritus, y viviremos? Y aquéllos, ciertamente por pocos días nos disciplinaban como a ellos les parecía, pero éste para lo que nos es provechoso, para que participemos de su santidad” Hebreos 12:5-10.  Dios preserva a sus escogidos para grandes propósitos, aunque para ello sea necesario pasar por una intensa disciplina. Recuerda algo: La disciplina divina es para corrección y no para destrucción.

Hoy, mientras dura tu peregrinación por esta tierra,  te encuentras bajo un proceso formativo por parte de nuestro Padre Dios. Todo va encaminado hacia dicho propósito.   Nada de lo acontecido ha sido por suerte o por las fuerzas ciegas del destino.   A lo largo de tus acontecimientos y a la luz de la reflexión bíblica has entendido que tu vida está inmersa bajo el poder y la soberanía de Dios; así como también bajo su gracia y misericordia.   ¡Cómo has aprendido a lo largo de todo este tiempo! Aquí se cumplen aquellas palabras de la Escritura: “Yo soy Jehová Dios tuyo, que te enseña provechosamente, que te encamina por el camino que debes seguir.” Isaías 48:17.


SIEMPRE ESTAS EN MANOS DE DIOS.

No temas a las circunstancias presentes. Él sabe todo lo que va a pasar de aquí en adelante contigo.   No te angusties por el mañana, no te angusties por las próximas horas. Dios lo sabe y todo está absolutamente bajo su control. Debes tener la plena certeza que lo que sucederá irá encaminado para tu bien.   “Y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados...   ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?” Romanos 8:28, 31.

Dios está pendiente de ti, al grado tal de darte siempre la palabra precisa que necesitas para cada momento específico de tu vida. A medida que reflexiones en su Palabra lo irás comprobando con mayor claridad. No dejes de hacerlo, no pierdas la sintonía con él, pues necesitas de su instrucción continua.

“Cuídate de no olvidarte de Jehová tu Dios.” Deuteronomio 8:11. Cuídate de no hacerlo. Reflexiona continuamente en su Palabra, es necesario que lo hagas para que no pierdas la noción de su realidad eterna y activa en todos los días de tu vida.   Cuídate de no olvidarte de Dios, pues él jamás te ha olvidado y jamás te olvidará. “¿Se olvidará la mujer de lo que dio a luz, para dejar de compadecerse del hijo de su vientre? Aunque olvide ella, yo nunca me olvidaré de ti. He aquí que en las palmas de las manos te tengo esculpida; delante de mí están siempre tus muros.” Isaías 49:15-16.



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martes, 17 de noviembre de 2015

¡CRISTO VIENE PRONTO!


El tiempo para que se cumplan todas las cosas está muy cercano. “No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca” Apocalipsis 22:10.   Al examinar la profecía bíblica entendemos que las señales del retorno de Cristo atestiguan claramente y sin ambigüedades su pronto cumplimiento. Todo se está cumpliendo tal y como él lo dijo.   No podemos evadir la realidad de lo que está sucediendo ahora en todo el mundo.

¡Cristo viene pronto! Él lo confirma: “¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro...   ciertamente vengo en breve”. Apocalipsis 22:7,20.   El contexto profético del libro del Apocalipsis nos hace ver la prontitud de su inminente regreso. El Señor no miente; sus palabras son fieles y veraces. “Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto”. Apocalipsis 22:6.

Sin duda alguna los cristianos estamos inmersos en un contexto mundial profetizado; no hemos de  evadirlo ni permanecer indiferentes. Dios pensó en cada uno de nosotros desde toda la eternidad para que seamos esas voces que “claman en el desierto” invitando al arrepentimiento genuino.   Por lo tanto, es necesario ponernos bajo las órdenes incondicionales de Dios para sembrar su Palabra; necesitamos invertir tiempo en nutrirnos y fortalecernos espiritualmente mediante la oración y la reflexión bíblica. Necesitamos estar capacitados con el poder sobrenatural del Espíritu Santo. No es una opción, es una necesidad urgente.

Haz lo que Dios te ordene sin temerle a las circunstancias; él ya dio órdenes expresas a sus ángeles para que te asistan de continuo. “Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra”. Salmo 91:11-12.    Dios ya preparó las oportunidades, todo estará perfectamente sincronizado, te facilitará las cosas aunque parezcan inalcanzables. Tendrás ayudas inesperadas e inusuales. Irás a favor del viento divino aunque tengas el fiero viento del mundo en tu contra.

No será en vano todo cuanto hagas para Dios.  “He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra” Apocalipsis 22:12.   Enfoca tus prioridades la obra encomendada“Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes, creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor no es en vano” 1 Corintios 15:58.

¡CRISTO VIENE PRONTO!




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lunes, 16 de noviembre de 2015

¿QUE PODRÍA DETENER EL JUICIO DE DIOS?


Todo está listo para que el juicio de Dios se derrame sobre todas las naciones de la tierra; las señales previas son evidentes, están ante nuestros ojos.   Estamos ante los eventos previos que desencadenarán la gran tribulación. “Y todo esto será principio de dolores. Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre. Muchos tropezarán entonces, y se entregarán unos a otros, y unos a otros se aborrecerán. Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos; y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará. Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin”.  Mateo 24:8-14.    La maldad ha llegado a grado superlativo; y cada acto cometido conlleva consecuencias irreversibles para el mundo.   El ambiente generalizado de maldad en todas sus facetas es un veneno que se ha esparcido en todas partes.

Nadie escapará del juicio de Dios, aun aquellos que durante toda su vida quedaron “impunes” ante la justicia...    aun aquellos que se escudaron en su poder económico e influencia social.   Todo saldrá a la luz ante el trono justo de Dios.   Todas las acciones escondidas serán reveladas. “Porque nada hay oculto, que no haya de ser manifestado; ni escondido, que no haya de ser conocido, y de salir a luz” Lucas 8:17.   Todo lo que con cuidado se escondió de la vista pública saldrá a la luz.   Será un juicio en el que hasta las acciones de los que ya murieron serán conocidas. “Y vi un gran trono blanco y al que estaba sentado en él, de delante del cual huyeron la tierra y el cielo, y ningún lugar se encontró para ellos. Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras. Y el mar entregó los muertos que había en él; y la muerte y el Hades entregaron los muertos que había en ellos; y fueron juzgados cada uno según sus obras”. Apocalipsis 20:11-13. Nadie podrá justificarse delante de Dios. Ni aun los muertos...


¿QUE PODRÍA DETENER EL JUICIO DE DIOS?

Lo único que podría detener el juicio de Dios sobre las naciones  es un arrepentimiento genuino y generalizado, comenzando por los gobernantes y los “grandes” de la tierra.   Este es el caso que vemos en la ciudad de Nínive y cuyos principios se pueden aplicar a nuestro contexto. “Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: Levántate y ve a Nínive, aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré. Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová. Y era Nínive ciudad grande en extremo, de tres días de camino. Y comenzó Jonás a entrar por la ciudad, camino de un día, y predicaba diciendo: De aquí a cuarenta días Nínive será destruida. Y los hombres de Nínive creyeron a Dios, y proclamaron ayuno, y se vistieron de cilicio desde el mayor hasta el menor de ellos. Y llegó la noticia hasta el rey de Nínive, y se levantó de su silla, se despojó de su vestido, y se cubrió de cilicio y se sentó sobre ceniza. E hizo proclamar y anunciar en Nínive, por mandato del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres y animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni beban agua; sino cúbranse de cilicio hombres y animales, y clamen a Dios fuertemente; y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña que hay en sus manos. ¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá Dios, y se apartará del ardor de su ira, y no pereceremos? Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo. Jonás 3.  Arrepentirse es sentir un dolor intenso en lo más profundo del corazón por haber pecado contra Dios, es reconocer que únicamente por medio de Jesucristo se obtiene la amnistía total de toda culpa, es dar un giro radical de vida. Es tener la determinación firme de vivir de acuerdo a las pautas que Dios ha revelado en su Palabra, es no volver atrás. Es mostrar frutos de cambio radical de vida. “¿Quién os enseñó a huir de la ira venidera? Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento”. Mateo 3:7-8.    Sin embargo, muchos a pesar de saberlo no proceden al arrepentimiento debido a su conciencia cauterizada por la práctica del pecado. Esa es la actitud que se observa ahora y que se observará en todo el mundo cuando los juicios de Dios arremetan con fuerza. “El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol, al cual fue dado quemar a los hombres con fuego. Y los hombres se quemaron con el gran calor, y blasfemaron el nombre de Dios, que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria. El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se cubrió de tinieblas, y mordían de dolor sus lenguas, y blasfemaron contra el Dios del cielo por sus dolores y por sus úlceras, y no se arrepintieron de sus obras.” Apocalipsis 16:8-11. ¡Terrible! Hasta donde llegará la dureza de los corazones. Ya está escrito que así será.

El tiempo para arrepentirse es hoy...
El tiempo para enderezar los caminos torcidos es hoy...
El tiempo para mostrar frutos dignos de arrepentimiento es hoy...
El tiempo para dejar de ser necios y duros de corazón es hoy...
El tiempo de la amnistía de Dios para todas las naciones de la tierra es hoy...

Tristemente casi nadie está tomando en cuenta el llamado al arrepentimiento.   Muchos saben que estamos viviendo tiempos profetizados, y aun así hay desprecio hacia el mensaje del evangelio.   ¿Qué más se puede hacer si nadie quiere dar pasos de arrepentimiento?   ¿Qué más puede suceder?   ¡LA OPORTUNIDAD ES HOY!   La oportunidad para arrepentirse, la oportunidad para abandonarse bajo la amnistía redentora de nuestro Señor Jesucristo, la oportunidad para inscribirse en “libro de la vida”. “Y vi a los muertos, grandes y pequeños, de pie ante Dios; y los libros fueron abiertos, y otro libro fue abierto, el cual es el libro de la vida; y fueron juzgados los muertos por las cosas que estaban escritas en los libros, según sus obras...   Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego” Apocalipsis 20:12,15.

¡CRISTIANOS TODOS!...
No perdamos la noción de nuestra responsabilidad prioritaria en el mundo.   Sabemos que estamos viviendo tiempos previos a la manifestación de nuestro Señor Jesucristo.   Sabemos que las señales previas a su venida son más que evidentes.   Sabemos que Dios nos ha puesto precisamente para estos tiempos profetizados.   Seamos como “esas voces que claman en el desierto” llamando al arrepentimiento.   Cumplamos con la misión asignada.   Pongámonos bajo las órdenes incondicionales de Dios para tal propósito.   Recordemos las advertencias claras que nuestro Señor Jesucristo nos hace ahora...

Mirad también por vosotros mismos, que vuestros corazones no se carguen de glotonería y embriaguez y de los afanes de esta vida, y venga de repente sobre vosotros aquel día. Porque como un lazo vendrá sobre todos los que habitan sobre la faz de toda la tierra. Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre”

Lucas 21:34-36.



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viernes, 13 de noviembre de 2015

CIUDADANOS DEL REINO ETERNO DE DIOS.


El REINO ETERNO de Dios es una realidad que está más allá de todo lo temporal y terrenal. Un REINO que se encuentra más allá de las fronteras del universo.  “Porque así dijo el Alto y Sublime, el que habita la eternidad, y cuyo nombre es el Santo: Yo habito en la altura y la santidad...” Isaías 57:15.   Un Reino con leyes eternas, rectas y justas; las cuales están todas reveladas en la Biblia. “Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia”. 2 Timoteo 3:16.    Un REINO que se hizo visible en la persona de nuestro Señor Jesucristo demostrándolo con la autoridad que tiene sobre todo principado satánico, la enfermedad, la muerte y la naturaleza. “... y cuál la supereminente grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, según la operación del poder de su fuerza, la cual operó en Cristo, resucitándole de los muertos y sentándole a su diestra en los lugares celestiales, sobre todo principado y autoridad y poder y señorío, y sobre todo nombre que se nombra, no sólo en este siglo, sino también en el venidero; y sometió todas las cosas bajo sus pies, y lo dio por cabeza sobre todas las cosas a la iglesia, la cual es su cuerpo, la plenitud de Aquel que todo lo llena en todo”. Efesios 1:19-23. Un REINO del que hemos llegado a formar parte todos aquellos que hemos creído en Jesucristo como nuestro mesías, nuestro Señor y Salvador; un REINO dentro del cual todos los creyentes somos “reyes” y “sacerdotes”. “y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos lavó de nuestros pecados con su sangre, y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos. Amén.” Apocalipsis 1:5-6. Un REINO que no está circunscrito a una nación específica sino a todas las naciones de la tierra que creen en él. “Pues todos sois hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús; porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos. Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús. Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y herederos según la promesa. Gálatas 3:27-29.  Un REINO que en la actualidad está creciendo junto a la cizaña de la maldad, pero que jamás prevalecerá contra él. Y les dijo Jesús: Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo. He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza del enemigo, y nada os dañará”. Lucas 10:18-19.


Vendrá el tiempo cuando Dios establezca su REINO ETERNO junto a sus elegidos, cuando se cumpla Daniel 7:18. “Después recibirán el reino los santos del Altísimo, y poseerán el reino hasta el siglo, eternamente y para siempre”; cuando en la gran tribulación irrumpa con su segunda venida para juzgar al mundo por la maldad reinante ocasionada por Satanás y sus ángeles. Cuando eso suceda, entonces Dios creará los “cielos nuevos y tierra nueva”, donde la vida será eterna, plena y completa.  “Pero el día del Señor vendrá como ladrón en la noche; en el cual los cielos pasarán con grande estruendo, y los elementos ardiendo serán deshechos, y la tierra y las obras que en ella hay serán quemadas. Puesto que todas estas cosas han de ser deshechas, cómo no debéis vosotros andar en santa y piadosa manera de vivir, esperando y apresurándoos para la venida del día de Dios, en el cual los cielos, encendiéndose, serán deshechos, y los elementos, siendo quemados, se fundirán. Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia. Por lo cual, oh amados, estando en espera de estas cosas, procurad con diligencia ser hallados por él sin mancha e irreprensibles, en paz”. 2 Pedro 3:10-14. Son cambios radicales que retan nuestra lógica; pero si Dios lo reveló y prometió, así será...


No lo olvides...

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios. Ten la plena certeza que lo eres. “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo; el cual transformará el cuerpo de la humillación nuestra, para que sea semejante al cuerpo de la gloria suya, por el poder con el cual puede también sujetar a sí mismo todas las cosas”. Filipenses 3:20-21.

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios. Dedica tiempo para escuchar la voz del Rey de reyes (Jesucristo) mediante la reflexión de su Palabra. Necesitas tener convicción plena de su contenido, la convicción que se trata de la única fuente de verdad y norma de vida.  “Tu palabra es verdad”. Juan 17:17.

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios.   Estás en la tierra seguir los pasos de nuestro Señor Jesucristo y para sembrar la semilla de su Palabra. Esa es tu misión prioritaria en la que debes permanecer siempre fiel; es necesario que te pongas bajo sus órdenes incondicionales para desempeñarla. “¿Quién es, pues, el siervo fiel y prudente, al cual puso su señor sobre su casa para que les dé el alimento a tiempo? Bienaventurado aquel siervo al cual, cuando su señor venga, le halle haciendo así” Mateo 24:45-46.

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios. Necesitas mantenerte firme en medio de toda tribulación y adversidad que se te presente aun hasta las últimas consecuencias, incluso la muerte. “Entonces os entregarán a tribulación, y os matarán, y seréis aborrecidos de todas las gentes por causa de mi nombre”. Mateo 24:9.

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios. Necesitas tener la plena certeza que tienes su cobertura total; manifestada por su protección, respaldo y provisión.  “Jehová es mi pastor; nada me faltará. En lugares de delicados pastos me hará descansar; junto a aguas de reposo me pastoreará. Confortará mi alma; me guiará por sendas de justicia por amor de su nombre. Aunque ande en valle de sombra de muerte, no temeré mal alguno, porque tú estarás conmigo; tu vara y tu cayado me infundirán aliento. Salmo 23:1-4.

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios. Por lo tanto, ten la certeza de su pronto y repentino regreso a la tierra.   Sus señales están a la vista. “Mas como en los días de Noé, así será la venida del Hijo del Hombre. Porque como en los días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y no entendieron hasta que vino el diluvio y se los llevó a todos, así será también la venida del Hijo del Hombre” Mateo 24:38-39.

Eres ciudadano (a) del Reino de Dios. Anhela y espera su regreso así como tu reunión definitiva con él. “El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, VEN, Señor Jesús”. Apocalipsis 22:20.


No lo olvides...
Eres ciudadano (a) del Reino de Dios.




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miércoles, 11 de noviembre de 2015

¡PACIENCIA!... TE FALTA POCO.

¡PACIENCIA!...  
Tu oración a Dios no ha pasado desapercibida. Todas tus peticiones están presentes ante el trono de Gracia. Ninguna ha pasado por alto. Dios es testigo de todo cuanto le has dicho.   Esas palabras que acabas de decirle han sido escuchadas con claridad. No dudes más, cree y espera.

¡PACIENCIA!...  
Dios no permanece indiferente ante las amenazas y peligros que ahora te envuelven. Necesitas recordar ahora que todo va encaminado hacia los propósitos eternos que él trazó para ti desde antes que nacieras. Hasta hoy te ha preservado fielmente en medio de situaciones que ni siquiera imaginas, has tenido su protección, respaldo y provisión.

¡PACIENCIA!...  
Lo que Dios te prometió lo hará realidad aunque todo lo tengas en contra. Él sabe cómo procederá, en que momento y lugar intervendrá. Todo lo tiene perfectamente sincronizado; “eso” que ahora te sucede es parte de su propósito final. Dios no miente y lo prometido lo cumplirá “sea como sea”.

¡PACIENCIA!...  
Dios te hará “retoñar” aun desde la rama más seca e improductiva, te hará “retoñar” desde cero posibilidades; te abrirá caminos de donde no los hay.   Todo será transformado para bien y de manera radical. 

¡PACIENCIA!...
Dios tiene el control de lo que te acontece ahora. Refúgiate bajo sus alas y bajo su soberanía perfecta. Nada te está sucediendo por suerte en estos momentos. Absolutamente nada.  Incluso, no es casualidad que él haya permitido que estas líneas estén ante ti para recordártelo en este momento.

¡PACIENCIA!...  
Pronto, todas tus cosas cobrarán sentido.   Entenderás porque fue necesario que sucedieran de esa manera tan “inaceptable” para ti.

¡PACIENCIA!...  
Espera creyéndole a Dios contra todo pronóstico...
Espera gozándote en Dios; que tu gozo no esté limitado a las circunstancias presentes.
Espera en paz, sin angustias. Dios sabe lo que hace contigo.
Espera en Dios dándole gracias por todo lo que ya comenzó a hacer.   Estás bajo sus soberanos procesos...

“Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo”
Romanos 15:13


¡PACIENCIA!...  
TE FALTA POCO.




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martes, 10 de noviembre de 2015

DIOS HARÁ JUSTICIA SOBRE LA TIERRA.


Las oraciones que claman por JUSTICIA DIVINA han sido escuchadas por Dios; Él no permanece indiferente ante estas voces de clamor continuo.   Dios hará justicia sobre la tierra en el tiempo establecido por él; ya tiene establecido “el día y la hora para hacerlo”. “Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se arrepientan por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al mundo con justicia”  Hechos 17:30-31.  Nadie escapará del juicio divino, Dios dará a cada uno lo que merecen sus malas acciones.   Ese día ya está escrito: “Miré cuando abrió el sexto sello, y he aquí hubo un gran terremoto; y el sol se puso negro como tela de cilicio, y la luna se volvió toda como sangre; y las estrellas del cielo cayeron sobre la tierra, como la higuera deja caer sus higos cuando es sacudida por un fuerte viento. Y el cielo se desvaneció como un pergamino que se enrolla; y todo monte y toda isla se removió de su lugar. Y los reyes de la tierra, y los grandes, los ricos, los capitanes, los poderosos, y todo siervo y todo libre, se escondieron en las cuevas y entre las peñas de los montes; y decían a los montes y a las peñas: Caed sobre nosotros, y escondednos del rostro de aquel que está sentado sobre el trono, y de la ira del Cordero; porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y quién podrá sostenerse en pie?” Apocalipsis 6:12-16.

¡AUN HAY TIEMPO PARA EL ARREPENTIMIENTO!




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viernes, 6 de noviembre de 2015

UNA VEZ MAS...


Una vez más, Dios te ha extendido su misericordia.   Si te das cuenta, no te ha retribuido conforme a tus acciones.   Puedes aplicar a tu vida lo que Jeremías expresa: “Por la misericordia de Jehová no hemos sido consumidos, porque nunca decayeron sus misericordias. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad”. Lamentaciones 3: 22-23.

Una vez más, Dios te ha extendido su gracia.   Ahora lo estás comprobando.   Te ha colmado de bendiciones que no mereces, y aun así lo continuará haciendo. “Porque de su plenitud tomamos todos, y gracia sobre gracia”. Juan 1:16.

Una vez más, Dios te recuerda que es por su gracia y misericordia que te abrirá “un nuevo capítulo” en tu inestable historia personal.

Una vez más, Dios te recuerda que es por su gracia y misericordia que sus propósitos eternos se cumplirán “al pie de la letra” sobre tu vida. Lo que él “escribió” sobre ti, lo cumplirá independientemente a tus méritos y capacidades personales.

Al abandonarte hoy bajo la GRACIA y la MISERICORDIA de Dios tendrás PAZ aunque no entiendas porque tienen que suceder ciertas circunstancias inexplicables que definitivamente te llevarán su plan perfecto; tendrás paz al apropiarte sus palabras fieles y verdaderas...

“Con amor eterno te he amado;
por tanto, te prolongué mi misericordia”
Jeremías 31:3




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miércoles, 4 de noviembre de 2015

¿CONSECUENCIAS AMARGAS?


La incredulidad, la impaciencia y tus impulsos te llevaron a cometer acciones equivocadas a lo largo de tu vida; y ahora enfrentas las consecuencias. Era de esperarse que así pasara, pues todo lo que se hace fuera del designio divino conduce al fracaso en todas sus formas.   Consecuencias amargas que ahora enfrentas, consecuencias que vienen siendo como pesadas cadenas que te impiden salir de la fosa de donde estás y que con el paso del tiempo te hunde más y más. La verdad es que ya no soportas tanta presión; pero Dios conoce a la perfección cada una de las consecuencias que tú decidiste propiciar a pesar de tantas advertencias recibidas en el pasado.  
Has reconocido que fallaste, y en una actitud humilde has acudido ante la presencia de Dios. Has orado reconociendo tu culpa.   Has reconocido que por tu incredulidad, impaciencia y tus impulsos procediste como no debía ser.    Has acudido al Trono de Gracia para implorar una oportunidad más a tu favor, aunque en realidad no lo mereces.

Necesitas saber que tu oración ha sido escuchada por Dios, pues mira en ella tu sinceridad, tu dependencia absoluta de él y la determinación de no volver atrás pese a tus debilidades.  Necesitas saber que la misericordia de Dios se hará realidad en tu vida, así como su poder sobrenatural y su soberanía. Dios enderezará todo lo que en tu necedad torciste.   Dios te enviará ángeles que te ayudarán a solventar el problema irreversible que provocaste. ¡Cree que así será!

Espera. Necesitas comenzar de nuevo, pero bajo los lineamientos de la Palabra de Dios; da los pasos de fe que te demande dar y las acciones que te pida ejecutar. Necesitas convicciones firmes para proceder, así como sabiduría de lo alto y valor para enfrentarte a las adversidades.

Espera. Dios puede sacar una bendición a partir de situaciones graves que el tiempo haya enterrado para siempre.   Será una bendición sobrenatural sin intervención humana, aunque para ello se valga de personas para llevarla a cabo.

Espera. Aun desde donde no hay nada lo tendrás todo mientras dure tu tiempo de peregrinación por el desierto de la vida.

Espera, aunque ahora todo lo tengas absolutamente en contra. Dios tiene su tiempo para cumplir sus promesas, aunque según tu parecer sean absolutamente irrealizables. Nunca es tarde para él. Todo será tal y como te lo prometió.   Dios ya tiene la fecha y el lugar donde verás la bendición.


“Estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo”
Filipenses 1:6


DIOS COMIENZA LO QUE TERMINA.
PONTE EN SUS MANOS.




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